El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, vaticinó ayer que las próximas elecciones municipales van a suponer un "gran alivio" para los españoles, ya que podrán "romper con lo que no les sirve", en alusión al PP, y prometió un "cambio de rumbo" caracterizado por el "respeto". Rodríguez Zapatero participó ayer en un mitin en Málaga en apoyo a la candidata a la alcaldía, Marisa Bustinduy, y en el que participó el presidente andaluz Manuel Chaves.

El Gobierno del PP, dijo el líder socialista, "podrá servir a otros, a Bush quizás, pero a los españoles ya no les sirve para nada". El líder socialista emplazó a los ciudadanos a que en los próximos comicios "decidan si quieren unos gobernantes que les respeten o les desprecien".

CRITICAS A LA GUERRA DE IRAK

Zapatero, que fue recibido con gritos de "¡presidente, presidente!" por los casi 8.000 asistentes al acto, hizo numerosas alusiones en su discurso al apoyo del Gobierno a la intervención militar de EEUU y el Reino Unido en Irak, de la que el PP "no quiere que se hable, porque no quiere perder las elecciones", afirmó.

Zapatero prometió que encabezará un Ejecutivo "democrático y honrado", capaz de poner en marcha una política económica innovadora que fomente "el avance social". Enfocando la consulta del 25 de mayo como si de unas elecciones primarias se trataran, afirmó que ese día se decidirá cómo se entiende la democracia en este país y si el Gobierno puede hacer "lo que le dé la gana" o debe escuchar a los ciudadanos. El líder socialistas ironizó sobre la visión que José María Aznar tiene del partido socialista, de quien dijo que estaba "en pelota". "El clima debe estar muy caliente, porque nos ven desnudos", bromeó Zapatero.

El socialista defendió como alternativa para "contar mucho en el mundo" que España fomente la cultura y el desarrollo, "nunca las guerras".