Angustiado porque muchos militantes le señalaban con el dedo acusador, José Blanco, secretario de organización del PSOE, puso la semana pasada su cargo a disposición del secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, para facilitar una salida a la grave crisis provocada por la traición de dos diputados socialistas de la Asamblea de Madrid. Zapatero rechazó la dimisión.

Mientras la cúpula del PSOE recibía el clamor de varias agrupaciones que invitaba al cese de Blanco, por opinar que fue clave en la composición de la candidatura a la Asamblea de Madrid, el secretario de organización ofreció su renuncia, según publicará esta semana el semanario Tiempo y confirmaron a este diario fuentes de la dirección socialista.

A pesar de estar muy afectado por "el boquete" abierto en el PSOE, Zapatero zanjó de inmediato la cuestión. Le dijo a su secretario de organización que después de haber dedicado tantos esfuerzos a luchar contra las injusticias, no iba a permitir ahora una "injusticia" contra él. Tiempo , precisa que "al menos hasta el momento" Zapatero cierra filas en torno a Blanco.

LUZ Y TAQUIGRAFOS

Mientras siguen conociéndose nuevos casos de corrupción urbanística, el portavoz parlamentario del PSOE, Jesús Caldera, exigió ayer al presidente en funciones de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón (PP), que paralice todas las operaciones urbanísticas pendientes de desarrollar en las que intervengan las personas incluidas en la querella de la Fiscalía de Madrid por su presunta participación en el pelotazo de Alcorcón.

En rueda de prensa, Caldera reclamó que se divulguen las operaciones urbanísticas en las que hayan participado esas personas. Muy especialmente, las de los constructores querellados Francisco Vázquez y Francisco Bravo, militantes del PP y amigos de Eduardo Tamayo, uno de los diputados traidores. Pero también las relacionadas con el propio Tamayo, con José Luis Balbás, otro expulsado del PSOE, y con el exalcalde de Alcorcón Pablo Zúñiga (PP).

Caldera comentó que si el Gobierno autonómico acepta su petición, demostrará que quiere dar la batalla a la corrupción. El portavoz socialista sostuvo que la trama de Alcorcón es "la misma" que la de Navalcarnero, Villaviciosa de Odón y Sevilla la Nueva, entre otras. Una red que volvió a vincular a la actuación de los tránsfugas.

EL ADOSADO DE SIMANCAS

Horas después de que la dirigente del PP Ana Mato animara a investigar sobre el "precio barato" --174.000 euros (29 millones de pesetas)-- que el socialista Rafael Simancas pagó en el 2002 por su adosado en Arroyomolinos, el expulsado José Luis Balbás, protector de los traidores, pidió que Simancas dimita como candidato a la presidencia autonómica. Balbás argumentó que la vivienda está en una parcela que urbanizó Euroholding, la empresa de Vázquez y Bravo. Pasó por alto que quien le compró el solar, construyó y vendió la casa es otra: CAM Vértice.