Aunque los expertos y la opinión pública coinciden en que la clase media cargará con el grueso del aumento tributario, el presidente del Gobierno siguió ayer defendiendo la tesis contraria. "El impacto más considerable se producirá en las rentas del capital, que es donde se concentran los ciudadanos que tienen más, que son esos 150.000 o 200.000 que van a contribuir con una subida media de 6.000 o 7.000 euros", sostuvo José Luis Rodríguez Zapatero
A diferencia de ocasiones anterior sí admitió, sin embargo, que "el impacto" de lo que aportan las rentas altas en el conjunto de la recaudación será solo una parte del aumento --800 millones de euros--, porque esos ciudadanos "son pocos".
En sus primeras declaraciones tras conocerse los detalles de la subida fiscal, Zapatero incidió en que la supresión de la deducción de los 400 euros del IRPF "no afecta a los mileuristas" y supone un esfuerzo para los ciudadanos que han conservado el empleo y cuya situación ha mejorado porque se han beneficiado en los últimos meses de la bajada del IPC y del precio de las hipotecas. Su aportación es necesaria para hacer frente, según el presidente, a los 15.000 millones de euros que el Estado deberá aportar para hacer frente a la atención de los desempleados.
¿Era imprescindible subir los impuestos o se podía aumentar más el déficit? Zapatero respondió con rotundidad: "Tengo que pensar en el futuro y no puedo dejar una deuda que hipoteque a las generaciones futuras". De no llevar a cabo ahora un "aumento fiscal moderado", a medio plazo habría que hacer "una gran subida de impuestos o un recorte de servicios".
LOS PODEROSOS El presidente identificó a los poderosos a los que en fechas recientes advirtió de que no cederá. "Son aquellos que han pedido al Ejecutivo que rebajara las condiciones del despido y que restringiera los derechos de los trabajadores a la vez que pedían una rebaja de las cotizaciones y más ayudas para sus sectores". Sobre el horizonte de salida de la crisis, añadió una nueva predicción. Si hasta ahora había vaticinado que a principios del 2010 empezaría la recuperación económica, ayer fijó para el segundo semestre del mismo año el inicio de la creación de empleo.
RECAUDACION La secretaria de organización del PSOE, Leire Pajín, tras la reunión de la dirección socialista, sostuvo ayer, pese a las numerosas críticas, que la subida de impuestos es progresiva, pero añadió que lo importante no es tanto de dónde se obtienen los ingresos --la mayor presión fiscal-- como que los gastos sean para política social.
