El proceso de paz sigue abierto. José Luis Rodríguez Zapatero ratificó ayer, en una entrevista en la cadena SER, que continúa "en el camino" hacia el final del terrorismo, aunque advirtió a ETA de que será "exigente al máximo" a la hora de comprobar que la voluntad de paz de la banda continúa vigente a pesar del robo de armas cometido en el sur de Francia la semana pasada. El jefe del Ejecutivo reiteró que el robo atribuido a ETA es un "hecho grave" que "no se comparece" con el alto el fuego que la banda decretó en marzo. Y avisó de que, si ETA buscaba echar "un pulso" al Gobierno, se ha "equivocado radicalmente".

Zapatero recalcó que no admite "pulsos" de los terroristas y que mantiene los "principios" de ausencia de la violencia y legalidad con los que en junio prometió conducir el diálogo con la banda. La comprobación de que los terroristas siguen apostando por el diálogo para la paz será "exigente" y "rigurosa", dijo el presidente, que dejó entrever que no habrá diálogo hasta que la banda se pronuncie.

UN UNICO MOVIMIENTO El presidente replicó a quienes sostienen que "improvisa" en la búsqueda del fin de la violencia, que sabe lo que hace y lo que quiere. Y recordó que el "único movimiento" que ha hecho el Gobierno tras el alto el fuego de ETA es anunciar en el Congreso que se abría el proceso de diálogo con los terroristas.

"Cuando tengamos algo relevante en torno al proceso, volveremos a informar a los grupos políticos", dijo ayer el presidente para explicar por qué aún no ha cumplido su compromiso de ofrecer detalles en el Congreso.

Buena parte de la entrevista la dedicó Zapatero a animar a Batasuna a aceptar las reglas de la democracia y a "tomar la decisión" de acatar la ley de partidos para poder presentarse a las elecciones municipales del 2007. El jefe del Gobierno aseguró que tanto él como el PSOE tienen la "máxima voluntad" de que la izquierda aberzale "represente el espacio que tiene en la sociedad vasca" en las decisiones políticas que conduzcan a un "acuerdo de convivencia en Euskadi" que contribuya a lograr "la paz".

El jefe del Gobierno tuvo palabras amables para el presidente del PP, Mariano Rajoy. Aseguró creer en la "buena fe" de los conservadores y confiar en su líder, pero dejó claro que no hablará con él hasta que rectifique su "equivocada" oposición al proceso de paz y presente una "mejor disposición" al acuerdo.

Por su parte, el director general de la Policía, Joan Mesquida, aseguró ayer en París que "en 10 o 15 días se podrá saber con certeza absoluta" si fue ETA la que robó 350 pistolas en Vauvert (Francia) el 23 de octubre, informa Montse Capdevila.