José Luis Rodríguez Zapatero se convertirá el 8 de mayo en el primer presidente español que acuda al campo de concentración de Mauthausen (Austria) para celebrar el 60º aniversario de su liberación y rendir homenaje a los combatientes antinazis. Participará en un acto organizado por el Gobierno austriaco y en otro convocado por las asociaciones de supervivientes españoles. El Gobierno ha negociado con éstas para que en la ceremonia ondee por vez primera la bandera constitucional de España. Lo hará junto a la enseña republicana.

Bajo las dos banderas, Zapatero depositará una ofrenda floral y pronunciará un discurso en homenaje a todos los españoles que lucharon contra el nazismo y que dieron su vida en defensa de las libertades. Mauthausen, liberado por EEUU el 5 de mayo de 1945, fue el campo por el que más españoles pasaron: unos 10.000, de los que murieron cerca de 6.000. Se le llama el campo de los españoles porque éstos representaban en 1942 el 60% de reclusos.

La determinación de Zapatero de acudir a Mauthausen enfrentó a la diplomacia al problema protocolario de las banderas. El presidente puso la condición de que en el acto estuviera presente la bandera constitucional de España.