El Centro de Emergencias 112 decretó en la tarde de ayer una situación de alerta en la región por la existencia de núcleos tormentosos, la posibilidad de fuertes vientos y precipitaciones de carácter local, e incluso con granizo. Así, recomendó circular por carretera con la máxima precaución y con atención a posibles desprendimientos de tierra, así como no atravesar vías inundadas, ni estacionar en cauces secos o a orillas de ríos.

De hecho, una tromba de agua caída entre las 17.30 y las seis de la tarde inundó calles del poblado pacense de Villafranco del Guadiana. Debido al atasco de los imbornales, el agua entró en muchas viviendas. La situación volvió a la normalidad al poco de intervenir los bomberos, avisados por la policía local, así como técnicos de Aqualia.

Silvia Carballo, una vecina afectada, se quejó de que "esto ocurre cada vez que llueve con intensidad, y los de Aqualia decían que no es de su competencia". También Badajoz registró fuertes lluvias, que fueron la causa de varios accidentes de tráfico, pero sin heridos, sólo con daños materiales.