165 alumnos ciegos o con discapacidad visual grave de Extremadura vuelven a sus actividades escolares y académicas con el apoyo de la Organización Nacional de Ciegos ONCE).
Así, según la agencia Efe, 27 profesionales de apoyo planifican las actividades previstas para el curso escolar. Este trabajo se desarrolla en consonancia con la Administración educativa.
Por nivel de estudios, en Extremadura 16 niños corresponden a Educación Infantil, 30 a Primaria, 22 a Secundaria, 8 a Bachillerato, 6 en Formación Profesional y 78 a otro tipo de enseñanza, muchos de ellos la universitaria.
Para cada nuevo curso, los servicios de producción bibliográfica de la ONCE trabajan intensamente para que, en la vuelta al colegio, los niños y jóvenes ciegos o con deficiencia visual grave puedan llevar sus mochilas el primer día de clase con los mismos libros, pero en braille, y con la misma ilusión que sus compañeros.
Estos profesionales se ocupan diariamente de atender las necesidades de cada alumno en todos aquellos aspectos relacionados con su discapacidad visual.
De esta forma, "la inclusión de alumnos con discapacidad en las aulas ordinarias consigue una integración de estos chicos en la sociedad y también el conocimiento de esta situación por parte del resto de niños, que conviven con las particularidades de sus compañeros", apostilla la ONCE.
