La nueva Ley Agraria de Extremadura aprobada el pasado jueves en el Parlamento regional otorga la posibilidad de ejercer su opción de voto a aproximadamente 25.000 agricultores y ganaderos de la región, bastante más del doble que los que fueron convocados en las últimas elecciones al campo, que se remontan a hace 13 años (3 de marzo de 2002), donde sólo tenían la posibilidad de ejercer este derecho 10.000 de ellos.

"Se trata de regular un proceso electoral con todas las garantías para medir la representación real de las organizaciones agrarias en el Consejo Asesor Agrario, que se ha constituido durante más de una década con los resultados de entonces y que por lo tanto está sin actualizar", declara el consejero de Agricultura, José Antonio Echávarri.

EL CENSO En la actualidad, el censo lo constituyen los afiliados a la Seguridad Social Agraria, pero tras la aprobación del jueves en la cámara legislativa la nueva ley permitirá ampliar este censo a los perceptores de las ayudas de la PAC que superen los 5.000 euros anuales o los que acrediten que, al menos, el 25% de sus rentas provienen del sector agrario.

El espíritu de la norma -recogida en el título 8 - persigue que sea el agricultor profesional activo, el que realmente viva del campo, el que tenga el derecho de voto para elegir a sus representantes. "Es más democrático dar voz y voto a otros muchos titulares de explotaciones agrarios porque no se trata del que tenga derechos a subvenciones públicas, que podría tener criterios más limitados, si no del derecho a votar", analiza Echávarri, quien recuerda que antes se elegían con las votaciones a los representantes en las Cámaras Agrarias, ya extinguidas.

"No se trata de elegir a representantes sino el conseguir el derecho a 'sillas' en el Consejo Asesor Agrario y no tiene mucha lógica -insiste- la elección de personas miembros del CAREX (Consejo Asesor Agrario)", destaca el consejero.

Otro de los aspectos a destacar es que se da la opción de que se utilicen las elecciones nacionales al campo -que también está a la espera de que se convoquen- para que se realicen a la misma vez las de Extremadura con el objetivo de que "logísticamente sea más viable y sostenible, pero es sólo una opción y no se da nada por cerrado en el texto legislativo", aclara Echávarri.

El reglamento de las elecciones al campo es muy similar, casi una copia, al modelo nacional de representatividad de las organizaciones y también del censo porque tanto la Ley Nacional Agraria como la Ley Agraria Extremeña permitirá que se celebren al unísono para aprovechar así toda la infraestructura.

La intención con la nueva ley es que haya elecciones al campo extremeño cada 5 años y no después de que pasen 13, como ha ocurrido ahora.