Recuperar la línea férrea de la Ruta de la Plata es económicamente rentable, sobre todo por el transporte de mercancías, según el estudio encargado por las Cámaras de Comercio; un tráfico que además sería moderno: se contempla incluso incorporar el traslado de camiones en plataformas o vagones. Pero ¿y la recuperación de los 330 kilómetros de trazado entre Plasencia y Astorga, por cuánto saldría?

A lo largo de los últimos años se han realizado diversos estudios en este sentido. Según el publicado por Luis Aliste Hernández a finales de 1999, el coste de la rehabilitación de la vía necesaria para que los trenes pudieran volver a transitar por este trazado sería de unos 210 millones de euros. De ellos la mitad serían para construir el túnel que, según Aliste, es necesario para salvar el puerto salmantino de Béjar.

Un posterior informe realizado por José Ponce González, contempla dos opciones. La primera sería rehabilitar la línea de Plasencia a Astorga con material desechado de la renovación de otras líneas de ferrocarril que se están convirtiendo a la alta velocidad. En este caso, el coste de inversión --incluido la infraestructura, la seguridad y la restauración de estaciones y pasos a nivel-- saldría por unos 60 millones de euros. Si por contra se apuesta por una modernización integral, con nueva plataforma, vía y traviesas, el montante sería superior a los 240 millones de euros.

Comparativamente con otras infraestructuras, el estudio de las Cámaras de Comercio recoge que la inversión no supondría un esfuerzo demasiado ingente, teniendo en cuenta que Fomento ha gastado 47 millones en 15 kilómetros de la autovía A-66 entre Salamanca y Béjar o los 200 millones presupuestados solo para el acceso del AVE a la ciudad de Mérida.