Más de 400 personas participaron ayer en la búsqueda de Encarnación Carmona, la joven discapacitada intelectual desaparecida en el municipio pacense de Quintana de la Serena, sin que se obtuvieran resultados. A ellos se sumaron 45 agentes de la Benemérita, de los que 18 llegaron desde Badajoz. El equipo de rastreo de ayer se completó con la policía judicial, otros tres guardias del equipo cinológico con 4 perros y personal de la Cruz Roja de la localidad y de Don Benito.

El dispositivo que coordina el capitán Francisco Gómez se dividió ayer por la tarde en 4 grupos de cerca de 80 personas. Peinaron la zona del río Ortiga, la del arroyo de La Mata, el enclave de Cancho Ruano y de nuevo la vieja fábrica de harina. Allí, el grupo correspondiente logró entrar en una nave que permanecía cerrada, esperando que Encarnación se hubiese escondido dentro.

NO MUY LEJOS La Guardia Civil no baraja otra hipótesis que no sea la del despiste de la joven. "Creemos que la niña está escondida porque es muy miedosa y tímida y debe estar acobardada, por eso no debe estar muy lejos", indicó el capitán García Morales. Por este motivo, la harinera se ha convertido en uno de los enclaves que se han registrado en varias ocasiones.

Para el capitán, las posibilidades de encontrarla con vida a pesar de los 4 días de su desaparición y del calor existente "son todas". Insiste en que hay casos en los que se ha encontrado al desaparecido una semana después. Razón por la cual, añadió que el dispositivo de búsqueda seguirá teniendo la misma intensidad que el primer día. Así, está previsto que el rastreo se reanude desde primera hora de esta mañana.