Medio centenar de 524 ciclos que se ofrecen en los centros de Formación Profesional de Extremadura necesitan ser modificados o sustituidos para adecuarlos a la demanda y el tejido productivo actual, según el Mapa de Empleabilidad de FP elaborado por la Junta.

El mapa ha sido presentado hoy en Mérida por la consejera de Educación y Empleo, Esther Gutiérrez, y el director general de Formación Profesional, Juan José Maldonado, que han incidido en que su elaboración ha permitido conocer cuáles son los ciclos con menor demanda y los que de manera urgente necesitan actualizarse o cambiar la especialidad.

Como ejemplo, se han señalado ramas de Electricidad "que llevan toda la vida y están obsoletos" y que tienen que adaptarse a la catalogación nacional, o el Ciclo de Madera, en Hervás (Cáceres), que se ha suprimido este curso por pocos estudiantes.

Según Esther Gutiérrez, de los 524 ciclos formativos que se ofertan, habría que modificar el 10 por ciento, una cuestión que, no obstante, ha precisado "no se puede hacer de manera urgente o rápida", sino progresiva y estableciendo un calendario para que los próximos años se pueda ir cambiando ese ciclo e implantar nuevas especialidades.

Para ello se necesita la colaboración de los equipos directivos de los centros, que apoyados en esta herramienta pueden hacer propuestas "realistas" sobre nuevas especialidades o que necesiten modificar, cuyo plazo para presentar los proyectos está abierto hasta el 15 de diciembre.

La consejera considera que el mapa es "una herramienta estratégica" para conocer y conectar la oferta y la demanda educativa y adaptarla a las exigencias actuales, además de que permitirá "repensar el modelo".

Ha recordado que desde el principio de la legislatura "estaba claro que era necesario un estudio serio y riguroso", para lo que la unión de la Consejería de Educación y Empleo ha sido determinante, además de la colaboración con la Consejería de Economía e Infraestructuras y la de Medio Ambiente y Políticas, organizaciones empresariales y grupos de acción local, entre otros colectivos.

Para la elaboración del mapa se han manejado unos 700.000 registros y se ha divido extremadura en ocho zonas, cuatro en la provincia de Cáceres (Cáceres, Navalmoral de la Mata, Plasencia y zona de Coria) y cuatro en Badajoz (Badajoz, Mérida, Don Benio-Villanueva y Zafra).

De este modo, se ha podido conocer cuales han sido los ciclos implantados en cada zona, sus especialidades y las conexiones con las empresas que hay en la zona, el empleo generado por estos ciclos, las necesidades futuras y su relación con lo marcado en la Estrategia de Especialización como son Agroalimentaria, Turismo, Salud, Tecnologías de la Información, Comunicación o Economía Verde y Circular.

Esther Gutiérrez ha indicado que pese a en los últimos diez años el sistema educativo regional ha perdido 11.000 alumnos, la FP ha crecido en 6.000 matriculas y se sitúa actualmente en 19.500 de las 24.000 ofertadas, el 90 por ciento de las cuales están en municipios de menos de 15.000 habitantes.

Por su parte, Juan José Maldonado ha precisado que la herramienta "tiene multitud de capas" , ya que se tienen en cuenta tendencias, la conexión con las familias profesionales, datos del Observatorio de Empleo, los contratos de trabajo o la afiliación a la Seguridad Social.

A su juicio, una de las virtudes de este mapa es que en él "se habla el mismo lenguaje entre Educación y Empleo", traduciendo datos del Catalogo Nacional de Ocupaciones, de la Clasificación de Actividades Profesionales, de los de centros, ofertas formativas, por nivel, titulados y directorio de empresas, con su proporción de empleados y su relación con familias profesionales.