El 50% de los casos de violencia doméstica están motivados por un consumo abusivo de alcohol por parte del agresor, un porcentaje que se eleva al 64% cuando, además, quien agrede ha ingerido otro tipo de drogas.

Así lo manifestó a Efe el director del Instituto de Medicina Legal de Cáceres, José María Montero, que participó ayer en Mérida en las X Jornadas de Información y Prevención organizadas por la Federación de Alcohólicos Rehabilitados de Extremadura (Falrex) bajo el título Alcohol y Convivencia .

El consumo abusivo de sustancias alcohólicas es un "factor de riesgo de primer orden" en la convivencia familiar y, por la experiencia acumulada, constituye "uno de los principales desencadenantes de la situaciones de violencia", afirmó Montero.

Por ello, indicó, se puede afirmar que de las 1.050 denuncias que se presentaron por malos tratos en Extremadura durante el año 2004, "la mitad pueden que estuvieran generadas de forma directa por el consumo de bebidas alcohólicas".

CONVIVENCIA DIFICIL En ese mismo sentido, el coordinador de Falrex, Antonio Macarro, reconoció que la convivencia con una persona alcohólica es "muy difícil", pues "es una persona que no tiene nada que ver con su familia", en la que vuelve a integrarse una vez rehabilitado.

Macarro explicó que entre 600 y 700 personas asisten semanalmente a las terapias de las once asociaciones que agrupa este colectivo en la región, en las que son atendidas por un médico, un psicólogo y un trabajador social. Además de las terapias, estas asociaciones organizan actos como el reparto de sangría sin alcohol y trípticos, colaboran con colectivos sociales y celebran numerosas jornadas para analizar este problema.