Entre 50.000 y 60.000 pacenses, según datos de la Policía Local, niños y padres, abuelos y nietos, se echaron ayer a las calles de Badajoz para presenciar en directo la comitiva que acompañaba a sus Majestades los Reyes Magos de Oriente que, con puntualidad británica, llegaron a las 19.45 horas, hora española, al paseo de San Francisco y a las ocho de la tarde en punto estaban en el templete para saludar a todos los congregados, que aclamaban sus nombres.

De las ocho carrozas que conformaban el desfile real, cinco se estrenaban en Badajoz, las otras tres cargaban con los tronos regios, rodeadas de niños que no paraban de saludar y de tirar caramelos. Estaba previsto repartir 5.000 kilos, que llovían por todos lados cuando pasaba la carroza real.

Unos 800 figurantes daban movimiento a la comitiva, de la que formaban parte comparsas de cuentos infantiles y de personajes Disney, escuadrones de centuriones romanos, un tren infantil, pasacalles, la comitiva de Herodes, carteros reales, la representación del Nacimiento, la Banda de Cornetas y Tambores de Santísimo Cristo Rey, la unidad motorizada de la Policía Local, la de caballería de la Policía Nacional, la unidad móvil de Protección Civil, malabaristas, cuentacuentos, luces, música y efectos especiales.

Todo para relanzar el espectáculo de la bienvenida a los Reyes Magos. Melchor (el concejal del PP Jesús Villalba), Gaspar (el también concejal del PP Alejandro Ramírez del Molino) y Baltasar (el zapatero Jorge Mendoza), no paraban de saludar y de hacerse fotos. La emoción era mayor en los padres que en sus hijos pequeños, algunos de los cuales no paraban de llorar cuando el señor de barbas los abrazaba para la instantánea.

MANIFIESTO Los primeros niños en recibir a sus Majestades fueron Carlos Raposo y Ester Martínez, encargados de leer el manifiesto de Unicef en defensa de los derechos de los más pequeños. "Os pedimos --leyeron-- nuestro mayor deseo, que es que se cumpla en cada rincón del mundo la declaración de los Derechos del Niño, el derecho al juego, el derecho a la educación, a una familia y, el más importante, el derecho a vivir".

Posteriormente, el alcalde, Miguel Celdrán, dio la bienvenida a los Reyes Magos, a quienes aseguró que los niños pacenses "siguen siendo buenos y solidarios con los que visitan nuestra tierra". Sus Majestades saludaron a los congregados y prometieron a los niños que si se acostaban pronto y dejaban sus zapatos en sitio visible, les dejarían los regalos que habían pedido. Hoy lo comprobarán.