La convocatoria de la organización Derecho a Vivir también ha tenido respuesta en las calles extremeñas. En Badajoz alrededor de medio millar de personas se concentraron en la plaza de España y en Navalmoral de la Mata en torno a 130 manifestantes también secundaron esta protesta contra el aborto que ayer se repitió en numerosas ciudades españolas.

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, mostró desde Trujillo su "respeto" a los manifestantes aunque aseguró no compartir las razones de estas protestas porque el objetivo de la reforma de la ley es "dar seguridad" a las mujeres y a los profesionales.

Por su parte, el presidente del PP en Extremadura, José Antonio Monago, contestó asegurando que "la verdadera preocupación de las mujeres extremeñas es su trabajo, el empleo, la igualdad salarial respecto a los hombres y los malos tratos", unos problemas que no se palian con "legislar que una niña de 16 años pueda abortar sin el permiso de sus padres".

Respecto a las manifestaciones, los asistentes a la de Badajoz se acercaron a la explanada comprendida entre el ayuntamiento y la catedral y se colocaron en la solapa pegatinas en defensa del derecho a la vida y gritaron frases como "Sí a la vida, no al aborto". El responsable de la organización en Badajoz, Daniel Caldera, hizo un llamamiento a continuar participando en las protestas, como la que organizan los días 25 de cada mes frente a una clínica que practica abortos.

En el acto organizado en Navalmoral intervinieron José María Bengoechea, cirujano jefe del HospitalCampo Arañuelo; Pepita Marcos, conocida profesora de Navalmoral y Enrique López, que será el pregonero de la Semana Santa en la localidad, además de dos miembros de un grupo cristiano. Palabras como matanza, genocidio o exterminio se repitieron en las intervenciones.