Un total de 61.040 kilos de aceitunas se han destruido en lo que va de año en Extremadura, según informó ayer el Campamento Dignidad, que instó a la Junta de Extremadura a una regulación efectiva del rebusco. En un comunicado, este colectivo lamentó que año tras año las incautaciones de aceituna en Extremadura procedentes de la represión del rebusco han aumentado, al pasar de 21.940 kilos en el 2017 a 61.040 kilos en lo que va de 2018.

Estos decomisos son efectuados por la Guardia Civil y van a parar a los ecoparques gestionados por la empresa pública de la Junta de Extremadura, Gestión y Explotación de Servicios Públicos Extremeños SAU (Gespesa), para su destrucción. Por ello, desde Campamento Dignidad se pide a la Junta que estas aceitunas no sean eliminadas y se les dote de un fin social.