Un total de 71 gasolineras repartidas por toda la región tendrán que permanecer abiertas hoy y mañana a pesar de la huelga convocada en el sector, ya que están incluidas en el decreto de servicios mínimos dictado por el Ministerio de Industria. Este decreto obliga a la apertura de 44 gasolineras en la provincia de Badajoz y 27 en la de Cáceres.

Esto supone que una de cada cinco estaciones de servicio ubicadas en Extremadura suministrarán carburante durante los días del conflicto. Como dato sorprendente cabe señalar que en la ciudad de Badajoz tendrán que cumplir servicios mínimos cinco estaciones de servicio, mientras que en la de Cáceres sólo habrá una, menos incluso que en localidades como Mérida (dos), Almendralejo (dos), Miajadas (dos) o Trujillo (dos).

En total, en la región están llamados a la protesta los 900 empleados de las 300 gasolineras existentes.

La huelga ha sido convocada a nivel nacional por los sindicatos UGT y CCOO. Esta convocatoria ha suscitado la crítica de la Unión de Consumidores de Extremadura (UCE), que ha lamentado en un comunicado la tendencia "a solucionar conflictos laborales a costa de los consumidores". Desde esta organización se critica que diferentes sectores económicos conviertan con frecuencia en "rehenes de situaciones que les son ajenas" a los consumidores a la hora de dirimir sus diferencias y salvar sus intereses.

La UCE indica en la nota que "comprende y comparte el legítimo derecho de los trabajadores a convocar una huelga y reivindicar así la mejora de sus condiciones laborales", pero no se admite que se utilice sistemáticamente a los consumidores en paros como los de los sectores ferroviario, aéreo y, ahora, el del suministro de combustible.

Por ello, esta organización de consumidores ha exigido a los sindicatos "respeto" en sus actuaciones y que se cumplan los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Industria. La UCE ha advertido de que va a realizar un seguimiento exhaustivo del desarrollo de la huelga "y en caso de que no se cumplan los servicios mínimos, no dudará a la hora de presentar la correspondiente denuncia ante los organismos competentes".

El paro de hoy y mañana viene motivado por las diferencias entre sindicatos y patronal en cuestiones salariales principalmente. Así, los sindicatos exigen una subida salarial del IPC mas el 0,75% en los próximos tres años, un plus de 60 euros por festivo trabajado y mejoras en la seguridad. Mientras, los empresarios ofrecen incrementos de sueldo del IPC mas el 0,30% el primer año, mas 0,40% el segundo y mas 0,50% el tercero, y que el plus de festivos sólo se cobre si se trabajan más horas de lo que marca la jornada.

Otro punto denunciado por los sindicatos y que no reconoce la patronal es la escasez de personal en la mayoría de las estaciones de servicio.