El pacto que regula las nuevas bolsas de empleo del Servicio Extremeño de Salud (SES) acaba de cumplir cinco años y cuenta con 96 bolsas abiertas en otras tantas categorías laborales. Entre todas estas suman un total de 112.734 solicitudes de más de 35.000 personas (algunas aparecen hasta en seis bolsas), que buscan trabajar en el SES aunque solo sea de forma temporal.

Pero cinco años después de que se rubricara aquel pacto de 2013 para que las bolsas fueran abiertas y permanentes (se actualizan una vez al año), todavía hay categorías que no tienen las nuevas bolsas activadas y otras ni siquera convocada, lo que les ha impedido en estos cinco años acceder a un trabajo temporal en el SES. Actualmente están en trámites las de las categorías de trabajador social, celador y pinche que suman más de 17.600 aspirantes que en estos momentos están presentando la documentación acreditativa de sus requisitos y méritos, el último paso antes de que se publiquen los listados de admitidos y excluidos y puedan comenzar a funcionar. Pero para eso aún quedan meses, ya que la consejería dispone de hasta seis meses para la publicación tras baremar los méritos. «La fecha en la que entrarán en funcionamiento las bolsas de trabajo de estas tres categorías dependerá en gran medida del volumen de documentación que aportes estos aspirantes, ya que posteriormente tiene que ser revisada por la Administración», explican desde la Consejería de Sanidad.

Los inscritos esperan que al menos se pongan en marcha antes del verano para poder optar a algún puesto de sustitución en los meses estivales. Y así se lo han transmitido al SES a través de un escrito en el que también agradecen que tras cinco años de espera estas tres categorías ya estén avanzando. Y advierten además de que el retraso en la puesta en marcha les perjudicará de cara a las próximas oposiciones, ya que este personal no ha podido acumular experiencia laboral en los últimos cinco años y la consecuencia de esto es que tendrán menos puntos en el concurso de méritos. Por ello, contando con este agravio ya irreparable, piden al SES que agilice la resolución de las bolsas pendientes. «Les pedimos encarecidamente que no dejen pasar de nuevo el periodo vacacional, que ultimen esfuerzos para que antes de las oposiciones podamos ver funcionar las bolsas de celadores, pinches y trabajadores sociales, así pasarían de ser categorías en activo junto a las demás», señala el escrito de la Plataforma de Opositores del SES, que concentra a cerca de 4.000 personas.

Pero además de estas tres, todavía hay categorías que ni siquiera han llegado a convocarse. Entre ellas están lavandero, telefonista y cocinero, «que se van a convocar a lo largo de este año 2018», anuncia el SES. Y hay varias más que antes de poder sumarse al nuevo sistema tendrán que reestructurarse como son fotógrafo, planchadora,.... «El resto de categorías que faltan por convocarse están pendientes de reestructuración porque son las llamadas bolsas residuales que tiene muy pocas personas», apuntan desde Sanidad.

RETRASOS Y RECURSOS / De esta forma, el pacto del 2013 por el que se regulan los procedimientos de selección de personal temporal y provisión de plazas con carácter temporal en los centros, servicios y establecimientos sanitarios públicos dependientes del SES, firmado por cuatro de los seis sindicatos con representación ante la administración, cumple los cinco años de vida. Durante el camino se han producido largos retrasos que han dejado fuera del mercado de trabajo temporal a muchos aspirantes que superaron los procesos selectivos anteriores (como el del 2011) y varios procesos judiciales que, entre otras cuestiones, han obligado a contabilizar los servicios prestados en la sanidad privada y que motivaron en el año 2016 una modificación del propio pacto del 2013 para evitar más demandas y dar más agilidad a los procedimientos.

Por que durante el primer año en vigor del pacto, apenas se convocaron las bolsas de trabajo de una decena categorías, que luego tardaron meses en ponerse en marcha. El mayor impulso a este nuevo sistema de bolsas se ha producido en los dos últimos años cuando se aumentó el personal de la unidad de baremación y en los que se han convocado y puesto en funcionamiento algunas de las bolsas más esperadas, con mayor demanda y por tanto con más volumen de documentación que gestionar. Pero aún hay trabajo por delante.H