Adif Alta Velocidad realizó ayer las pruebas de carga en los cuatro viaductos del tramo Arroyo de la Charca-Grimaldo, de 6,4 kilómetros de longitud, perteneciente a la línea de alta velocidad (LAV) Madrid-Extremadura a su paso por la provincia de Cáceres. Estas pruebas han concluido de manera satisfactoria.

Las pruebas han consistido en la ubicación de configuraciones de cargas sobre los viaductos antes de su puesta en servicio, con el objetivo de confirmar que la construcción se ha llevado a cabo con satisfacción. El ensayo también ha servido para verificar que el comportamiento estructural se corresponde con el previsto.

Los cuatro viaductos del tramo, sobre los que se han verificado estas pruebas son: el viaducto sobre el Arroyo del Perbetano, de 175 m de longitud, el viaducto sobre el Arroyo del Judío, de 140 m, el viaducto Viña de los Frailes, de 280 m, y el viaducto sobre el Arroyo del Rivero, de 350 m. Todos ellos suman un total de 945 m de longitud.