Los colectivos representativos de los agentes forestales extremeños y algunos profesionales a título particular han salido al paso de las declaraciones realizadas por otros agentes donde se indicaba que el desánimo y desmotivación han provocado un incremento de bajas durante el verano y que no se acudiese con la rapidez habitual a los incendios.

Tanto los sindicatos CCOO y UGT, como la Asociación de Agentes Forestales de Extremadura, si bien han reconocido que existe bastante descontento por la actitud del Gobierno extremeño, han apuntado que esta cuestión no ha incidido directamente en ningún momento en el desempeño de su labor diaria.

Antes al contrario, indican que muchos agentes se incorporaron al servicio pese a estar de vacaciones al conocer la situación que se vivía en la comunidad autónoma en la primera quincena de agosto.