Sacyr Valoriza Minería acaba de comunicar a dieciséis de sus trabajadores su finalización de contrato en la mina de Aguablanca de Monesterio. La reunión tuvo lugar este martes en las instalaciones mineras, con la presencia de los propios trabajadores, representantes de las centrales sindicales CCOO y UGT, así como de los responsables de la filial de Sacyr, Valoriza Minería, empresa propietaria, desde finales del pasado año de los activos de la multinacional canadiense Lundin Mining en nuestro país.
Tras el cese de extracción de mineral y después de hacer efectivo el despido de la mayoría de trabajadores, la entonces concesionaria, Río Narcea, mantuvo contrato a una treintena de empleados, en tareas de mantenimiento, control y vigilancia de la explotación, a la espera de ver resuelta la Declaración de Impacto Ambiental, (DIA), totalmente necesaria para una posible reanudación de la actividad minera a través de galerías.
El pasado mes de diciembre, tras conocerse la compra de activos por parte de Sacyr, la nueva concesionaria mantuvo una reunión con los trabajadores a los que transmitió “tranquilidad”. Según explicaron entonces los representantes sindicales, la nueva empresa se comprometió a “mantener la misma situación laboral y el mismo organigrama, hasta disponer de la Declaración de Impacto Ambiental”.
A las tres de la tarde de este martes estaba convocada la reunión en la que los responsables de Sacyr han comunicado los nuevos despidos. De los actualmente veinticinco trabajadores, sólo se quedan nueve. Los despidos se hacen efectivos a partir de este miércoles, fecha en la que ya no han ido a trabajar doce empleados. Otros tres cesarán su relación laboral el próximo día 28 y uno más en el mes de marzo.
A la salida de la reunión, Saturnino Lagar, de la Federación de Industria de Comisiones Obreras, ha explicado que la empresa argumenta como motivos principales de los despidos “una Declaración de Impacto Ambiental que no llega, y el bajo precio del mineral”.
Hay que recordar que hace solo unos días, el Ministerio de Medio Ambiente ha pedido, por cuarta vez, documentación complementaria para la resolución de la DIA, un requerimiento que ha “indignado” a trabajadores, representantes sindicales y ayuntamientos afectados, (Monesterio, Cala y El Real de la Jara), que el pasado lunes reunieron en Zafra la Mesa de Seguimiento, donde se decidió solicitar una reunión urgente con la Delegada del Gobierno, con la finalidad de que el Ejecutivo de Mariano Rajoy “resuelva de una vez la Declaración de Impacto Ambiental”.
Incompetencia
Saturnino Lagar ha vuelto a lamentar “la total incompetencia del Ministerio”, que “está provocando que dieciséis familias más se queden en desempleo a partir de hoy”, y mientras tanto “nuestro Gobierno mira para otro lado”. Los representantes de la Mesa por Aguablanca, manifiesta Lagar, “no vamos a seguir consintiendo que nuestro Gobierno tenga a Extremadura fuera el mapa”, con lo que se seguirán realizando “las acciones oportunas”, hasta conseguir la DIA, con el objetivo claro de que, “cuando llegue, la planta se vuelva a abrir, y a los nueve trabajadores que quedan en la mina se sume la incorporación de los dieciséis despedidos, y el resto de quienes perdieron su trabajo, y al día de hoy están en casa con todas sus prestaciones agotadas”.
