Lo que antes no les costaba menos de cinco euros ahora supone 1,5 euros y ante eso es difícil resistirse. El ahorro económico ha sido el principal motivo que ha impulsado a una empresa agrícola extremeña, Sol de Badajoz, en la localidad pacense de Valdivia, a sumarse al carro de la innovación y apostar por lo que todavía muchos ven con cierta reticencia: el vehículo eléctrico. El pasado verano el propietario del negocio, que se dedica a la comercialización de frutas y hortalizas, sustituyó las furgonetas y algún turismo que los técnicos utilizan para moverse por las fincas por pequeños vehículos idóneos para esta tarea. "Ahora hacemos 70 u 80 kilómetros --que es su autonomía-- por 1,5 euros", explica el director-gerente, Francisco José Escobar, que considera una inversión de futuro la nueva compra.

De momento ha cambiado seis vehículos de la flota por turismos sostenibles, pero no descarta sustituir todos los que dispone si le sigue siendo igual de rentable como hasta ahora. "Antes de decidirnos adquirimos uno de los coches para probar qué tal funcionaba y nos dimos cuenta de que realmente supone un ahorro económico importante", explica, además de contribuir a la conservación del medioambiente. Cada vehículo, que ha sido adquirido en un concesionario de Murcia ha costado unos 8.000 euros, pero ajustándose a las condiciones del Plan Movele estatal ha conseguido un ahorro de casi 2.000 en cada uno de ellos. Con esta adquisición Sol de Badajoz es la primera empresa extremeña en apostar por el transporte sostenible.