El presidente del Foro Nuclear, Ignacio Araluce, principal responsable de la Central Nuclear de Almaraz durante 14 años, señaló ayer que la planta extremeña se ha rejuvenecido y goza de una salud técnica excelente, por lo que «debe y puede» funcionar más allá de los 40 años. Araluce, quien hizo estas declaraciones en repuesta a los periodistas en conferencia de prensa para presentar el informe de los resultados nucleares de 2016, afirmó que la resolución del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) para reformar el sistema de renovación de las licencias de las nucleares propuesta por el Gobierno es «la decisión más sensata» que se podía alcanzar en el panorama energético.
Destacó que la reducción del plazo le parece una actitud sensata en un momento en el que se tiene previsto debatir el futuro del marco legal y regulatorio energético español, por lo que consideró acertado que las nucleares «pospongan su decisión», informó EFE.
«La resolución supone un cambio, debido a que hasta ahora para la renovación se pedía el envío de la solicitud con tres años de antelación y con la resolución tomada ayer se permitirá hacerlo cuando se tenga una aproximación más precisa y detallada del futuro marco energético en el que se van a mover». Agregó que esta modificación no «supone ningún problema técnico» porque la documentación para estudiar la futura viabilidad de la planta se seguirá enviando con tres años de antelación. En este punto, señaló que la central extremeña de Almaraz, que contaba de límite hasta el 8 de junio para pedir la renovación más allá del 2020, deberá enviarla para su estudio técnico y únicamente se aplaza la petición formal de renovar o no.
El presidente de la patronal nuclear valoró la «necesidad» de definir un marco legal futuro del mix energético español, sobre todo en lo que se refiere a la retribución a las nucleares y apostó por una reinversión constante y a largo plazo para que se puedan alcanzar consensos de forma más fácil.
Araluce recalcó que la industria nuclear es un sector competitivo y experimentado en España y que unas 27.000 personas dependen, de una manera directa o indirecta de ella. Además ha realizado exportaciones por un valor de 280 millones de euros en servicios, bienes y tecnología.
En 2016 las nucleares españolas generaron el 21,39% de la electricidad consumida, es decir 58.578 GWh, lo que representa mas del 35% de la electricidad sin emisiones de efecto invernadero. Por ello cree que solo por los compromisos adquiridos por el Acuerdo de París y del Clima por parte de la Unión Europea, para el 2030 se debería duplicar la potencia instaladora de renovables en España, que es altísima ya.
Respecto al marco fiscal del sector detalló que la nuclear atraviesa un momento financiero complicado debido, entre otras causas, a que durante los último años los impuestos se han «comido» casi el 50% de los ingresos del sector. Por ello defendió una modificación de esta fiscalidad.
En este punto, agregó que la nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) podría funcionar perfectamente desde un punto de vista técnico.
