Las compañías tabaqueras Altadis y Philip Morris cerrarán en breve un acuerdo con el Ministerio de Agricultura para la compra de un tercio de la producción de tabaco extremeño --unos 10 millones de kilos-- hasta el 2010. Estos acuerdos entre el Gobierno central y la Junta de Extremadura, con las dos multinacionales, pretenden garantizar la estabilidad del sector tabaquero y dar salida comercial al cultivo por un periodo de entre tres y cinco años. La firma del acuerdo "está básicamente cerrado y sujeto a concretar pequeños flecos", según han reconocido a EL PERIODICO EXTREMADURA agentes del sector.

Inicialmente, las cantidades de compra que se manejan rondan los 10 millones de kilos, de los que el 60% sería adquirido por Altadis y el 40% restante por Phililp Morris. Aunque ninguna de las dos multinacionales confirmaron estos extremos, fuentes oficiales han afirmado a este diario que no habrá grandes variaciones, e incluso podrían verse aumentadas. El Ministerio de Agricultura y Philip Morris Internacional ya firmaron el pasado 15 de noviembre, en Mérida, un acuerdo de colaboración para mejorar la calidad y competitividad del tabaco español, por el que además la compañía estadounidense se comprometía a adquirir tabaco de la variedad virginia de la cosecha del 2006.

AVANCE Y CRITICAS AL PP A pesar de ser una negociación del Gobierno, el acuerdo fue avanzado ayer por el presidente regional del PP, Carlos Floriano, tras una reunión mantenida el presidente de Apag-Asaja, Bibiano Serrano. El líder popular consideró "muy positivo" el acuerdo, que "parece que va a fructificar a finales de marzo o primera quincena de abril", ya que ese volumen de compra es un elemento esencial para la supervivencia cultivo del tabaco, informa EFE.

Sin embargo, el Gobierno extremeño ha sido muy crítico con esta variante en la posición del PP en relación con el futuro del cultivo en España, donde Extremadura representa casi el 90% de la producción nacional. El consejero de Agricultura, José Luis Quintana le recordó a Floriano que la gestión del Partido Popular cuando gobernaban a nivel nacional fue poner el 1 de enero del 2006 como fecha de caducidad para el cultivo, además de intentar privatizar Cetarsa. "Que deje (Floriano) de apuntarse los tantos que están logrando, por el bien de este sector, el Gobierno central y la propia Junta de Extremadura".

DAR ESTABILIDAD El secretario general de Agricultura, Josep Puxeu, ya avanzó el pasado año que estas negociaciones van dirigidas, sobre todo, a dar estabilidad al sector productor extremeño. "El acuerdo garantiza la vinculación de la primera y segunda transformación del tabaco y, por tanto, la salida comercial de la producción". En estos momentos, las transformadoras extremeñas tienen sus ventas cerradas y han eliminado los problemas de existencias almacenadas de campañas anteriores.

Sobre este aspecto, el PP extremeño discrepa sobre este matiz al entender que el acuerdo ayudaría a eliminar los excedentes, como en la época en las que gobernaban los populares, en la que se pagaba el kilo a un euro. Floriano señaló ayer que ahora hay tabaco sin vender y el kilo de tabaco se paga más bajo, entre 60 y 70 céntimos el kilo.