La Consejería de Educación y Empleo ya tiene alternativa a la ESO de los mil euros. El plan del Ejecutivo anterior para lograr que los jóvenes de entre 18 y 25 años que un día abandonaron las aulas lograran el título de Secundaria se transformará el próximo año en un programa, sin retribución económica, que permitirá a estos jóvenes acceder a una certificación profesional y retornar al sistema a través de algún oficio o actividad concreta. "Porque los chavales no quieren saber qué es una raíz cuadrada sino qué se hace detrás de la barra de un bar o cómo se coge un torno", explica Miguel Coque, responsable de Empleo de CCOO.

Este sindicato, junto con UGT y la Creex, participó ayer en la reunión en la que los responsables de la administración educativa presentaron el borrador de un programa de educación, formación y empleo que busca "profesionalizar el mercado laboral extremeño", según la consejería. También pretende aprovechar las instalaciones educativas para la formación que no sea reglada.

Este programa prestará especial atención a los jóvenes sin formación, un colectivo que incluye a más de 18.600 extremeños. A ellos va dirigido una parte de este plan de formación y empleo presentado ayer, que comenzará en marzo y consistirá en un curso de seis meses de duración impartido, a priori, en los institutos de la región. Estará centrado en la adquisición de las competencias claves, como Lengua y Matemáticas, pero no en exclusiva. "Lo más importante es que los programas van a ir acompañados de un plan de habilidades sociales. No sólo adquirirán los conocimientos base de Lengua y Matemáticas, sino que se van a reforzar las habilidades de la persona a la hora de tomar decisiones, tener mayor autoestima y encontrar un mejor puesto de trabajo", precisó el secretario general de Empleo, Javier Luna.

Después de eso, los jóvenes tendrán la oportunidad de acceder a un certificado de profesionalidad (hay tres niveles de diferentes especialidades), "con el que podrán competir por un puesto de trabajo con mayores garantías", señala la consejería. El certificado reconoce la capacitación para el desarrollo de una actividad laboral adquirida a través de la vía formativa reglada o no reglada y mediante la experiencia laboral. Es lo más parecido a una titulación académica oficial, puesto que tiene validez en todo el país. "Se valora en cualquier proceso de selección que convoquen las administraciones públicas y te acredita profesionalmente ante la empresa privada".

En definitiva, se trata de un "curso puente o pasarela" que permitirá acceder a otra formación sin la necesidad de requisitos académicos previos. "No podemos conformarnos con que estos jóvenes sean mano de obra barata, si queremos cambiar el modelo productivo de la región, debemos empezar por los jóvenes, y luego habrá que ir sumando a este plan otros colectivos como parados de larga duración o profesionales que buscan una recualificación", insiste Coque.

NOVEDAD El curso de adquisición de las competencias clave es novedoso. El año pasado se convocaron estas pruebas pero por libre, lo que supuso que apenas entre el 20% y el 30% de los aspirantes la superasen, según el secretario general de Educación, Rafael Rodríguez de la Cruz. Para su impartición, la consejería contratará nuevos profesores, en un número "que dependerá de la demanda que haya".

Este plan contendrá también acciones de orientación laboral constantes y cercanas para ayudar a los jóvenes que salen del sistema reglado desde el primer momento y a lo largo de la vida profesional. Desde CCOO insisten en que la formación reglada no debe ser la única vía para formar a los trabajadores. Pide una memoria económica del programa y que se desarrolle con "gobernanza social territorial", lo que supone que no solo dependa de los directores de los centros de enseñanza donde se imparta.

La consejería y los agentes sociales y sindicales volverán a reunirse el próximo 5 de diciembre para cerrar esta iniciativa una vez estudiado el borrador presentado ayer. La administración espera que comience a funcionar el próximo marzo.