La recta final del 2007 en Extremadura, en lo que a meteorología se refiere, estará marcada por el tiempo seco y sin precipitaciones --ni de lluvia ni de nieve--, pero sobre todo por un descenso de las temperaturas que harán caer los registros de los termómetros por debajo de los cero grados centígrados, especialmente a partir del fin de semana.

Las predicciones del Instituto Nacional de Meteorología (INM) apuntan hacia una bajada generalizada de las temperaturas, tanto en lo que se refiere a máximas como a mínimas. En este sentido, en la mayor parte de la región el mercurio no sobrepasará los 14 grados como cota más alta de esta semana y el comienzo de la próxima, mientras que los valores más bajos pueden ser inferiores a los cero grados. De hecho, en las dos capitales provinciales, Cáceres y Badajoz, se espera que los registros mínimos alcancen ese umbral el sábado y el martes, primer día del 2008. Además, en puntos del norte de la comunidad, como por ejemplo en Piornal, podrían llegar hasta los cuatro grados bajo cero.

En general los cielos estarán despejados o ligeramente nubosos, algo más nublados durante el fin de semana. No se esperan precipitaciones y la cota de nieve estará en torno a los 1.500 metros.

Esta situación puede afectar al tráfico, dado que las previsiones indican que se producirán heladas moderadas, más fuertes en el norte y este de la región. Además, los que vayan a utilizar el coche estos días --en los que se espera mayor circulación por las celebraciones de Nochevieja y Año Nuevo-- deben tener en cuenta que el INM ha avisado de bancos de niebla y brumas matinales, especialmente en zonas bajas y valles.

La situación más complicada se puede producir en el norte. De hecho, Meteorología ya ha activado la alerta amarilla --de riesgo medio-bajo y la tercera en gravedad, tras la alerta roja y la naranja-- por temperaturas bajas en prácticamente toda Castilla y León. Así, en las provincias de Salamanca y Avila --limítrofes con Extremadura-- el pronóstico avisa de temperaturas de hasta 4 grados bajo cero. En este sentido, vías de acceso a Extremadura tan importantes como la N-630 --Ruta de la Plata-- o la N-110 (que enlaza con Avila) pueden verse afectadas por nevadas débiles y heladas fuertes, sobre todo en las zonas más altas (como Béjar o el Barco de Avila).

Del resto de carreteras principales que comunican la región con otros puntos del país, también pueden registrar algunos problemas de este tipo la A-5 y la N-435, ya que tanto en Toledo como en Ciudad Real se prevén nieblas matinales, heladas moderadas y registros próximos a los cero grados.