El presidente de APAG Extremadura Asaja, Juan Metidieri, sostiene a este diario que la situación actual en el campo extremeño, debido al descenso de la capacidad de los embalses extremeños, es «bastante deficitaria». A pesar de que por el momento «no hay muchos problemas» para el abastecimiento del ganado, considera «evidente» que durante el verano se van a producir «problemas muy serios» en el abastecimiento para el ganado ovino, porcino, vacuno y caprino. Metidieri puntualiza que esta falta de suministro no se producirá por igual en todas las zonas, pero en aquellas donde la pluviometría ha sido menor, poniendo como ejemplo la zona oeste de Badajoz y parte de los Llanos de Cáceres, afirma que en 15 o 20 días se producirá una escasez de agua. Por el momento, desde la organización no han cuantificado las pérdidas económicas que puede suponer el descenso de abastecimiento por cabeza de ganado, pero quiere dejar constancia de que el problema del agua «es muy serio», mucho más que en lo relativo a la alimentación por el estado de las infraestructuras.

Con respecto a la repercusión que puede tener en los cultivos el descenso del agua almacenada en los embalses extremeños, el presidente de la organización reconoce que la incidencia «ya se empieza a notar en los cultivos permanentes por la escasez hídrica que tenemos en el suelo». Si el verano continúa en esta línea, después de la ola de calor que se registró el pasado mes de junio, cultivos como el olivar y la viña «se van a resentir mucho». De hecho, Metidieri señala que ya hay algunas zonas del campo extremeño donde los olivares «ya empiezan a perder color y a desprenderse se sus frutos para que pueden vivir». De esta forma, el presidente no se muestra muy confiado en las expectativas de mejora de cara a los meses de estivales. «Las expectativas del verano con la calor que está haciendo son pésimas, y de continuar así, va a haber daños muy importantes tanto en olivar como en viña, los cultivos permanentes», puntualiza.