El presidente de la Asociación Profesional de Agricultores y Ganaderos de Extremadura (Apag), Bibiano Serrano Calurano, anunció ayer que, tras un acuerdo entre sindicatos, organizaciones agrarias, SEXPE y Delegación del Gobierno en Extremadura, este colectivo se encargará de la contratación de 1.500 trabajadores extremeños y otros 63 de nacionalidad polaca.

Serrano explicó que este acuerdo había sido necesario ante la escasez de trabajadores dispuestos a vendimiar y recoger aceituna en años anteriores. Esta falta de mano de obra había provocado, por el efecto llamada, una llegada masiva de inmigrantes ilegales a la región. Concretamente, según datos aportados por Bibiano Serrano, el año pasado acudieron a la comarca de Tierra de Barros más de 2.000 inmigrantes sin papeles.

Esto provocó que en la comarca problemas sociales, ya que al no haber sitios adecuados para su alojamiento pernoctaban a la intemperie; problemas sanitarios, pues al no contar con documentación no acudían al médico; y problemas de seguridad y orden público, dado que al no conseguir el trabajo se produjeron robos de alimentos en diversas tiendas.

En este sentido apuntó como a estos problemas, los empresarios agrarios tenían que sumar, al no haber trabajadores suficientes para atender las necesidades del sector, el no poder recolectar cuando los frutos se encuentran en el momento idóneo.