El cuerpo sin vida de un joven de 20 años natural de la localidad pacense de Guareña apareció en la tarde de ayer en un canal de riego cercano a este municipio, sin que al cierre de esta edición se hubieran determinado las causas exactas de la muerte, informaron a este diario fuentes cercanas al caso.

UN CANAL DE METRO Y MEDIO Los hechos sucedieron en torno a las siete de la tarde. En el lugar del suceso únicamente se encontraba el cadáver en el interior del canal, sin restos de vehículos que pudieran suponer que había caído. Es más, el canal apenas tiene un metro y medio de profundidad, por lo que la autopsia revelará si la muerte se produjo o no por ahogamiento.

Fuentes municipales consultadas por este periódico informaron anoche que no se descartaba ninguna hipótesis sobre la muerte, desde un fatal accidente a otra causa de mayor gravedad. Estas mismas fuentes no quisieron concretar nada más al respecto dado lo extraño de algunas circunstancias que rodean el fallecimiento.

El suceso ha causado una profunda conmoción entre los vecinos del municipio, donde el joven era muy conocido.