La Policía Judicial achaca en un informe hasta tres presuntos delitos al brigada de la Guardia Civil José Padilla, jefe del destacamento de Tráfico de Trujillo. En concreto, este atestado previo, realizado a instancias de la propia Dirección General de la Guardia Civil e incluído en las diligencias previas del Juzgado de Instrucción número 1 de Trujillo, imputa a Padilla por presuntos delitos de malversación de caudales públicos, extorsión y prevaricación, según confirmaron a EL PERIODICO EXTREMADURA fuentes cercanas a la investigación.

Así, y tal y como desveló en su día este diario, continúa la investigación judicial abierta en diciembre contra el mando de la Guardia Civil a raíz de un escrito anónimo presentado por los propios agentes del destacamento en el que le acusaban de extorsionar a empresarios de la zona y de intimidar a sus agentes.

Este anónimo provocó la apertura de un expediente gubernativo por parte de la Dirección General de la Guardia Civil y, al mismo tiempo, las diligencias de oficio en el juzgado de Trujillo. El atestado judicial realizado por la Unidad Orgánica de la Policía Judicial considera que hay indicios de que el brigada extorsionó a varios empresarios de la zona en beneficio propio, adoptó resoluciones injustas conscientemente y se apropió del dinero destinado por Interior a sufragar el arreglo de su vivienda.

El problema ahora es que el expediente interno, tal y como marca el procedimiento habitual de la Dirección General de la Guardia Civil, está paralizado a la espera de que haya una resolución judicial. Así las cosas, en una semana finaliza la suspensión cautelar de tres meses que Interior impuso a Padilla en un primer momento. A día de hoy no hay ninguna nueva resolución del ministerio, según ha confirmado la propia Dirección General de la Guardia Civil, por lo que si no se adopta ninguna decisión de última hora José Padilla podría reincorporarse el 13 de marzo a su puesto.

Ante esta situación, la acusación particular del caso, la Asociación Unificada de la Guardia Civil, ha solicitado a la jueza de Trujillo que, ante la alarma social creada entre los agentes y los empresarios que han acusado a Padilla, cese de forma cautelar al jefe de Tráfico de Trujillo.