Mensaje de tranquilidad tras la inquietud inicial. Puede seguir yendo al cine y después a tomar una hamburguesa. También puede comerse algún que otro chuletón o una paletilla de cordero, incluso unos huevos con bacon y, por supuesto, no hay que renunciar a una ración de jamón ibérico. No hay razón para desterrar carne y embutidos de la lista de la compra, pero si la come todos y cada uno de los días, quizás llegue a tener uno o muchos problemas de salud y algunos de ellos muy graves. Es el mensaje en el que ayer coincidieron autoridades sanitarias, expertos y también las empresas cárnicas de la región, tras la revelación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que ha sorprendido a la ciudadanía y ha indignado al sector cárnico, hasta el punto que los productores de ibérico no descartan acciones judiciales si la OMS no rectifica y el consumo se retrae de forma importante.

"No han sido lo suficientemente explicativos y en el caso del cerdo ibérico, no tienen en cuenta estudios que avalan esta carne como un producto cardiosaludable", rebate la secretaria técnica de la Asociación Española de Criadores de Cerdo Ibérico, Elena Diéguez, desde las oficinas de Zafra. Reconoce el "malestar" y la "preocupación" que han originado en este sector, fundamental en Extremadura, las conclusiones del principal organismo sanitario internacional. Asegura que las refutarán con nuevas publicaciones científicas que corroboren la calidad y las garantías de la carne ibérica.

INVESTIGACION "Encargaremos nuevos estudios que sabemos que van a demostrar que lo que se ha dicho no es cierto", explica Diéguez, que aunque está convencida de que el consumo en España no se verá afectado --"los consumidores conocen el producto, que es exquisito y sano", dice-- no quita que en otros países sí que estas conclusiones puedan tener mayor peso específico "por miedo", explica.

El Centro Internacional de Investigaciones del Cáncer (CRIC), dependiente de la OMS, advirtió el lunes del riesgo de cáncer --especialmente de varios tipos de cánceres digestivos como el cáncer de colon o tumores en páncreas y próstata-- que implica el consumo de carne roja y procesada, especialmente en el caso de productos ahumados, curados o en salazón. El análisis promovido por la OMS precisa que por cada 50 gramos de carne procesada que se consume a diario aumenta "en un 18%" el riesgo de sufrir cáncer de colon, y sitúa en "un 17%" el peligro para quienes toman a diario 100 gramos de carne roja.

Esas palabras irritaron a la industria europea de la carne que, a través de un comunicado, ya se apresuró a rechazar ese mismo día tales consideraciones, que tacharon de "inapropiadas".

A ese texto se remitían también ayer desde el consejo regulador de Ternera de Extremadura, visiblemente molestos al otro lado del teléfono. "Es un alarmismo infundado al que se está dando una importancia excesiva", señaló Miguel Morillo, director técnico de la Indicación Geográfica Protegida, donde temen los efectos que las palabras del grupo de expertos de la OMS pueden tener sobre el consumidor, más aún a las puertas de la campaña navideña, una de las más importantes del año para la comercialización de sus productos.

Con más sosiego afronta las conclusiones del estudio catedrático de Fisiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Extremadura, José Enrique Campillo, que resta trascendencia al informe. "Es algo que se sabía desde hace muchos años", resume ante el revuelo originado. De hecho

recuerda que esas conclusiones tienen en cuenta las que previamente se han extraído de 800 estudios analizados por el panel de expertos que de OMS que cada año aborda conjuntamente un tema (en el 2016 verán la relación del café y la hierba mate con el cáncer). Pero para el experto en nutrición, "lo perjudicial es el abuso, comer solo carne" y para evitarlo recomienda: "comer de todo, rotando los alimentos e incluyendo verduras o frutas en todas las comidas".

Su receta para que la ingesta de carnes rojas o procesadas sea saludable es no consumirlas más de una o dos veces por semana y hacerlo siempre acompañado de verduras "para contribuir a contrarrestar el posible efecto cancerígeno". Además lanzó un mensaje de tranquilidad: "puede seguir saliendo un día a la semana a comer una hamburguesa con los niños, no pasa nada", señaló.

En la misma línea se expresó el presidente del Colegio de Médicos de Badajoz, para quien las conclusiones de la OMS no hacen sino "dar la razón a los médicos españoles, al avalar la dieta mediterránea que defendemos y recomendamos y que propone comer de todo y en dosis proporcionadas", concreta Pedro Hidalgo. También matiza que la OMS "no dice que el consumo excesivo de carne precocinada sea causa de cáncer, sino que puede ser causa de cáncer" e indica que abusar de la carne genera importantes transtornos de salud "como ya sabíamos".

QUE Y COMO El médico pacense sitúa el consumo de carne dentro de la pirámide alimenticia y recuerda que no hacerlo "puede ser tan perjudicial como el exceso". Pero entiende que la clave está en lo que recomienda a sus pacientes siempre: que lo importante no es qué se come sino "cómo se come". "Es más cardiosaludable la cuchara que el tenedor y no es lo mismo comer tomate que tomate frito, ni pescado en blanco, que pescado rebozado... y en el caso de la carne, además la cantidad que se come", concluye.

Por otro lado califica de "barbaridad" extrapolar este informe al consumo de jamón ibérico porque para que fuera nocivo "habría que comer jamón 14 veces a la semana", mientras que los factores "cardiosaludables" de este embutido "están avalados por distintos estudios".

El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara (que además es médico) fue una de las voces que también defendió ayer que el consumo "moderado" de carne de vacuno, ovino, caprino y porcino, dentro de una dieta saludable "no es malo nunca". La casualidad quiso que ayer, precisamente, asistiera a la inauguración una fábrica de jamones, embutidos y elaborados frescos en Malpartida de Plasencia y allí enmarcó el terremoto originado por las conclusiones de la OMS en las "guerras de los mercados" y citó las palabras del alquimista Paracelso que decía que "todo en la vida puede ser bueno o malo dependiendo de la dosis".

El consejero de Sanidad, José María Vergeles, también pidió "sosiego" tras el informe de la OMS y recordó que las agencias de seguridad alimentaria tendrán ahora que "interpretar" los resultados del informe y realizar las recomendaciones dietéticas que estimen. En todo caso invitó a no "satanizar" la ingesta de carne roja, --como ya sucediera en otras épocas con productos como el aceite de oliva, el pescado azul o las conservas--, porque se dejarán de tomar "nutrientes esenciales que aporta este alimento y no hay que perder".

La Unión de Consumidores de Extremadura también apostó por mantener las recomendaciones de la dieta mediterránea".