La producción apícola extremeño obtenida en la trashumancia que se lleva a cabo en Castilla y León caerá un 60% respecto a un ejercicio habitual, debido a la sequía. El responsable del sector Miel de Asaja, Paulino Marcos, asegura que los efectos de la falta de lluvias en tierras castellanoleonesas han sido aún más fuertes que en Extremadura, a lo que se unió una helada que afectó a robles, nogales y castaños.