En estos tiempos difíciles para la economía, tener imaginación puede ser la clave para triunfar en el mercado. Enrique Espinosa, Rocío Pina, David Pérez, Carmelo Rodríguez, Diana Hernández, Miguel Molina y Paul Natorp saben muy bien como hacerlo. Todos ellos son jóvenes de éxito en sus empresas, que lo han conseguido a base de innovación y que ayer pusieron en práctica sus conocimientos en Mérida, mientras tomaban un café con grupos de jóvenes extremeños, en una cita organizada por el Gabinete de Iniciativa Joven denominada 4H Economía de la Imaginación . Son ejemplos de como triunfar en la arquitectura (la empresa Pac-Man es un buen ejemplo), en el sector de viodeojuegos y la animación (Miguel Molina es uno de los responsables de la empresa Zinkia, creadora del televisivo Pocoyó) o dentro de las escuelas de negocios (Natorp es uno de los impulsores de la famosa escuela danesa Kaos Pilot).
Así, mientras tomaban un café, los participantes pudieron aprender de Miguel Molina que una buena gestión y grandes dosis de creatividad pueden hacer triunfar a una empresa dentro de la industria creativa hasta llegar a cotizar en bolsa, como es su caso.
Aquellos que quieren llegar a tener liderazgo creativo tomaron buena nota de las explicaciones de Natorp para liderar los cambios de hoy y mañana.
Los arquitectos miembros de Pac-Man enseñaron a potenciar la participación ciudadana en sus proyectos y a acercarse a la dimensión económica de los proyectos culturales.
Todo ello argumentando en que la "la sociedad de la imaginación persigue un cambio de desarrollo regional basado en la capacidad de sus ciudadanos, especialmente de sus jóvenes, para utilizar y aplicar su imaginación, su creatividad y su innovación a sus proyectos personales", señala el gerente del Gabinete de Iniciativa Joven, Juan Pablo Venero.
Para él resulta "gratificante" comprobar como "en este discurso tan intangible de la economía de la imaginación hay personas que ya han cumplido sus sueños, aportando valor a su zona y creando empleo".
