Las Cámaras de Comercio de Badajoz y Cáceres celebraron ayer un encuentro empresarial del sector de la construcción en el marco de la Feria Ibérica de la Construcción que contó con la asistencia de una veintena de participantes, entre los que se citaron representantes de las empresas constructoras como de las cámaras y otras asociaciones. En ella realizaron un análisis de la situación actual del sector de la vivienda así como del borrador que la Junta de Extremadura ha editado sobre esta materia.

Los asistentes debatieron y analizaron las alegaciones que las cámaras han elaborado sobre los puntos recogidos en ese borrador, señaló ayer Francisco González, presidente de la comisión de la Construcción de la Cámara de Comercio de Cáceres que actuó como portavoz.

González reconoció que no es el primer contacto que tienen con esta materia puesto que llevan trabajando desde hace mes y medio en la elaboración de un borrador de 8 folios con propuestas que ya está finalizado y que se ha enviado a la Consejería de Fomento para cerrarlo definitivamente. Lo calificó como "un estudio porque en el momento en el que se encuentra el sector, el único lugar en el que se puede refugiar la construcción es en la vivienda protegida", recalcó. Considera que el sector tiene viabilidad en cualquiera de los índices de protección porque la vivienda privada en la actualidad no tiene viabilidad alguna.

El representante de la Cámara de Comercio de Badajoz advirtió que el sector de la construcción ha puesto muchas ilusiones en este convenio, y está muy esperanzado con que salga adelante lo antes posible. Consideran que será una tabla a la que muchos se podrán asir para salir adelante y poder hacer frente a la crisis económica que atraviesan. "Esperamos que tenga financiación económica porque sin ella y sin firmar el convenio no se puedo tirar para adelante y hacer nada". Por eso insiste en que "lo hemos estudiado muchísimo porque es el único recurso que tenemos todos los promotores y constructores de Extremadura como mínimo en los dos próximos años".

A pesar de las esperanzas puestas en él, advierte de la necesidad de llegar a acuerdos que garanticen que el sector evite pérdidas a la hora de construir. A su juicio, hay un problema en los módulos y en las formas finales de ese convenio, puntos con los que no están de acuerdo y lamentó que "esto se está dilatando y en la situación actual terrible, si no espabilamos, puede ser peor". Algunos de los desencuentros son "pequeñas vicisitudes" acerca de los alquileres, venta, precios del módulo y quién puede y en qué porcentajes adquirir viviendas.