La Dirección General de Tráfico (DGT) lleva a cabo esta semana una nueva campaña especial dedicada al control del transporte escolar, por lo que se están realizando inspecciones sobre los vehículos y sobre los conductores.

Según ha informado hoy la Delegación del Gobierno en Extremadura, la campaña se lleva a cabo especialmente en carreteras convencionales y en vías urbanas.

En cumplimiento con la programación de las operaciones de vigilancia y control para el año 2017 de la Dirección General de Tráfico, la campaña conllevará un importante incremento de los controles con la utilización del máximo número de medios humanos y materiales disponibles, según ha informado la delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera.

En este sentido, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil contará con la presencia en estas carreteras durante estos días de unos 400 agentes y contará con la colaboración de las Comandancias de Seguridad Ciudadana de Badajoz y Cáceres, en este caso también de los ayuntamientos de la región.

Cristina Herrera recuerda que desde el curso escolar 2007-2008, todos los vehículos dedicados al transporte escolar deben cumplir los requisitos que se recogen en el Real Decreto 443/2001 de 27 de abril sobre las condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores.

En el mismo, se establecen diversos requisitos como la obligatoriedad de que los menores vayan acompañados en el autobús por una persona debidamente cualificada, la antigüedad máxima de los vehículos destinados a este tipo de pasajeros, el seguro de responsabilidad civil ilimitado o la obligatoriedad de llevar señal de transporte escolar, entre otros, de singular importancia.

Además, desde 2013 todos los camiones y autobuses nuevos de la UE deben contar con un sistema de frenado de emergencia que se active automáticamente cuando detecta la posibilidad de una conexión.

Según las estadísticas oficiales, el 90% de los accidentes que se producen durante el transporte escolar tienen lugar en el momento de subir o de bajar del vehículo, o en los instantes inmediatos.

En muchos casos, se trata de atropellos causados por una distracción del conductor del transporte escolar o de los acompañantes.

En este sentido, es muy importante que los menores vayan correctamente sentados, con el cinturón de seguridad abrochado o el dispositivo de retención infantil adecuado a su peso, talla y edad, recuerda la Delegación del Gobierno en su nota.

La importancia del transporte escolar en zona urbana, sobre todo en determinados lugares donde existe una mayor concentración de colegios, hace que la participación de todos los ayuntamiento en esta campaña especial tenga una relevancia especial.

Así, está comprobado que a 50 kilómetros/hora -velocidad máxima permitida en vías urbanas- las posibilidades de que un niño sobreviva sin ninguna medida de seguridad es prácticamente nula; de hecho, ni siquiera a poca velocidad se garantiza su supervivencia.

La última campaña en las carreteras extremeñas, realizada en enero de este año, conllevó un total de 96 vehículos controlados, de los que fueron denunciados 69 para un total de denuncias de 163.

La mayoría de las infracciones se produjeron por no contar con la autorización especial para realizar transporte escolar (68).