Extremadura siempre ha despertado interés en el extranjero por su riqueza cultural, artística y medioambiental, pero ahora parece interesar de una forma distinta a los foráneos. Cada vez más, extranjeros con alto poder adquisitivo ponen sus ojos en los pueblos extremeños con el objetivo de comprar fincas, siendo hasta ahora los alemanes, holandeses e ingleses los más activos y la Sierra de Montánchez y La Raya los lugares elegidos.

Algunos de ellos están llegando a pagar más de 12.000 euros por hectárea de cercas y fincas de secano, según publica el último número de la revista Caudal de Extremadura, recogida por Efe.

Las comarcas de la Sierra de Montánchez y la de La Raya, en la zona de Valencia de Alcántara, son las más demandas.

En esta última zona, el extremeño Francisco Luis Picado y los holandeses Coen Verharen y Elisabeth Steur crearon el pasado año la empresa www.extremaduraproperties.com, que atiende a posibles compradores procedentes tanto de España como de Europa del norte. Prueba del interés y la creciente demanda por parte de clientes extranjeros, señala la revista, es que la empresa los atiende en holandés, inglés, alemán o español.

La Sierra de Montánchez no le va a la zaga y desde el propio municipio de Montánchez hasta el de Almoharín se han intensificado las ventas de fincas a alemanes en los últimos meses.

La caza, otro reclamo

Este creciente interés ha sido visto también por la Junta, que el pasado año inició los contactos con empresas y touroperadores de Estados Unidos para vender la región como reclamo cinegético.

El Ejecutivo regional quiere aprovechar este potencial en Extremadura para atraer a turistas extranjeros relacionados con el mundo de la caza.

No en vano, Extremadura está a la cabeza en la lista de las regiones con más valor ornitológico y tiene el mayor porcentaje de superficie cubierta por áreas importantes para las aves. En la comunidad extremeña habitan 500 parejas de buitre negro, 130 de águila real y 93 de águila perdicera. El interés, por tanto, está servido.