Tanto el Gobierno de Extremadura como Francisca Rosa, portavoz del PP, quisieron dejar ayer muy claro que una cosa es la "deriva" que está tomando Julián Carretero como máximo responsable de CCOO en Extremadura y otra muy distinta la propia organización sindical en sí. Así, Luis Alfonso Hernández Carrón, consejero de Salud, puso el acento en que Carretero "ha dejado tirados" a los representantes de este sindicato cuando estos, en la Mesa General de la Función Pública, el 30 de diciembre de 2013, dieron el visto bueno a dicho proceso. Y Rosa advirtió de la "deriva personal" de Carretero, que "mira más por su futuro político que por la tarea de CCOO, utilizando a los trabajadores y al sindicato como trampolín político".