Bronca, algún amago de agresión y una evidente división interna protagonizaron los instantes previos a la celebración de la X Asamblea de IU-Extremadura, que finalmente reeligió a Víctor Casco como coordinador regional y le proclamó candidato de la coalición a la Presidencia de la Junta. A las 9 de la mañana, medio centenar de partidarios del secretario general del PCEx, Cristóbal Guerrero, intentaban entrar en la reunión para denunciar la, a su juicio, ilegal anulación de las actas de elección de 40 delegados afines a las tesis del dirigente comunista. Según Casco, sólo se anularon tres actas y 25 fueron corregidas.

Miembros de la dirección regional de IU les impidieron el paso, lo que dio lugar a acusaciones mutuas y algunos empujones. Finalmente, Guerrero y sus partidarios (entre los que había 90 delegados que debían participar en la asamblea, según Guerrero, apenas 30 según Casco) optaron por irse y celebrar una reunión paralela. Mientras, el resto de delegados --108 sobre los 177 elegidos en las distintas asambleas locales, según el coordinador de IU-- daban inicio al cónclave que a partir de ahí transcurrió sin incidentes.

Tras el informe de actuación presentado por la dirección saliente, tuvieron lugar las votaciones. En la destinada a elegir el candidato a la Presidencia de la Junta, Casco, único que se presentó, obtuvo 89 votos a favor y dos en contra, mientras que hubo diez votos en blanco y dos nulos. En cuanto al consejo regional de la coalición, la candidatura encabezada por Casco obtuvo 65 votos (el 61%), lo que le dio 19 representantes, mientras que la que lideraba Juan Manuel Romera lograba 19 votos (6 representantes) y la de Antonio Carrasco 18 votos y cinco representantes.

Esta nueva dirección fue la encargada de elegir a su vez al coordinador, cargo que repite Casco al conseguir 25 votos a favor y cinco en contra. Tras su reelección, Casco, recibido por los delegados con gritos de "¡unidad!", lanzó un breve discurso donde indicó: "A partir de mañana el trabajo es lograr más candidaturas en toda la región y defender el proyecto socialista".

En su encuentro con la prensa, Casco habló de un proceso "en la más absoluta normalidad" que manifiesta "firmeza y unidad" y demuestra que "aquí hay pluralidad y debate pero somos capaces de salir a representar a IU". Sobre la actitud del grupo afín a Guerrero, el coordinador de IU habló de "intento de golpe de Estado a la soberanía e independencia de IU". Pese a todo, tendió su mano a los críticos "para seguir avanzando".

Por su parte, el representante de la dirección nacional en la Asamblea, el diputado madrileño Jorge García aseguró que la reunión "ha sido respetuosa con los estatutos de IU".

Desde los críticos, se anunció que consideraban ilegal la elección de Casco por lo que sería impugnada y que el grupo afín a Guerrero se va a constituir en corriente interna.