Prácticamente la mitad de la población de Extremadura está concentrada en las 10 localidades más grandes de la comunidad autónoma: Badajoz, Cáceres, Mérida, Plasencia, Don Benito, Almendralejo, Villanueva de la Serena, Navalmoral de la Mata, Zafra y Montijo. Pese a ello, el estudio Población de la Fundación BBVA y el Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE) indica que la región ha experimentado un proceso de concentración urbana muy inferior a la media nacional.
La decena de municipios más poblados de Extremadura reúne a un total de 470.510 habitantes, siendo Badajoz la única que supera los 100.000 vecinos, según los datos del padrón municipal del Instituto Nacional de Estadística (INE) relativos al 1 de enero del 2007. Esto supone el 43% de los extremeños residentes en la comunidad (1.089.990).
Esta investigación también constata la desproporción existente entre el territorio que ocupa la región y su población. Así, mientras que su extensión representa el 8,3% de la superficie de España, sus habitantes apenas constituyen el 2,4% de las personas que residen en todo el país. Esto da lugar a una de las densidades de población más bajas del Estado, "especialmente reducida en la provincia de Cáceres", donde apenas se llega a 21 habitantes por kilómetro cuadrado.
Esta situación, según los autores, es fruto del menor crecimiento experimentado por Extremadura a lo largo del siglo XX. Esto se ha traducido en un menor peso demográfico, perdiendo más de dos puntos porcentuales: los extremeños han pasado de representar el 4,6% de los habitantes del país en el año 1900 al 2,4% durante el 2007.
CRECIMIENTO "No obstante, como ha ocurrido en la mayoría de las provincias españolas, Extremadura ha aumentado su población en los primeros años de esta década" , apuntan desde la Fundación BBVA e IVIE. De hecho, Badajoz y Cáceres son los núcleos que han registrado los mayores crecimientos, al aumentar su padrón municipal en más de 11.000 y 8.000 habitantes, respectivamente, en los últimos siete años.
Otro dato que constata las diferencias en la evolución demográfica experimentada a nivel regional en relación al conjunto del país es el tamaño medio de los municipios. Así, mientras en Extremadura la media de habitantes por localidad es de 2.846 personas, en el conjunto de España es prácticamente el doble (5.573). Esto se debe a que la comunidad autónoma "tiene una alta presencia de municipios pequeños y cerca del 9% de la población extremeña reside en pueblos de menos de 1.000 habitantes".
Todo esto tiene un aspecto positivo, de acuerdo con los autores del informe: la región solamente cuenta con un municipio menos que a principios del siglo pasado, mientras que en ese mismo periodo el número de pueblos se ha reducido "considerablemente" en el conjunto del país. En este sentido, apuntan que en otras zonas de España, como en Huesca, Teruel o Soria el abandono de pequeños municipios se ha convertido en uno de los principales problemas de los gobiernos autonómicos y locales. Una de las promesas electorales de Guillermo Fernández Vara en las últimas elecciones autonómicas fue la de adoptar medidas para lograr fijar a la población extremeña en el ámbito rural de la comunidad autónoma.
