El sindicato CCOO de Extremadura avisó ayer del peligro que corren los 800 empleos que actualmente mantiene Acorex si su situación financiera no mejora y abogó por la creación de un plan laboral que logre la estabilidad de los trabajadores.

Así lo manifestó el secretario general del sindicato, Julián Carretero, en una rueda de prensa en la que abordó diferentes asuntos de actualidad y en la que en la que también culpó al Gobierno de José Antonio Monago de haber provocado la crisis de la Agrupación de Cooperativas de Regadío de Extremadura (Acorex). Carretero recordó que Acorex ha vuelto a remodelar por cuarta vez su consejo de dirección y consideró que "no acaba de ver la luz para resolver su problemática".

"Si no están todas las cooperativas que tienen que estar y falla casi el 50% de aquellas que debieran estar, no creo que sea la mejor solución", afirmó. Asimismo, el líder sindical mostró su preocupación por la situación de los casi 800 trabajadores de la cooperativa, entre los que son propios y los que pertenecen a la cooperativa base, pues, a pesar de que hasta el momento no ha habido bajas, cree que la caída en la facturación puede provocar ajustes.

"Si había un problema societario que no ha cambiado en dos semanas, hay un riesgo evidente de que haya una reestructuración de plantilla", subrayó.

La vicepresidenta extremeña, Cristina Teniente, replicó por su parte también ayer que el Ejecutivo esta haciendo su labor "de mediador del conflicto" en la situación que atraviesa Acorex y añadió que "desconocía" que CCOO estuviera entre los interlocutores válidos. "Lo que está haciendo es de mediador de un conflicto con los interlocutores válidos y no sabía que entre ellos estaba CCOO, es bueno enterarse hoy (por ayer) de que el interlocutor valido es CCOO", agregó Teniente. La vicepresidenta indicó que el Ejecutivo ha hablado con las partes con el objetivo es buscar la estabilidad y la paz social, la profesionalización y la viabilidad "sin más interferencia que esa".