Las organizaciones sindicales CCOO y UGT en Extremadura denunciaron ayer, con motivo de la celebración de la Jornada Mundial del Trabajo Decente, la permisividad de los gobiernos ante los abusos empresariales que buscan conseguir beneficios rápidos, a costa de los derechos laborales y sociales.
La Jornada Mundial del Trabajo Decente se celebra este año bajo el lema 'Stop a la avaricia empresarial. Precariedad y bajos salarios es igual a más desigualdad y más pobreza'. En un comunicado, las organizaciones sindicales lamentaron que en España, "ejemplo de una malentendida austeridad impulsada en la eurozona como receta para salir de la crisis", ha sido el propio Gobierno, "a través de una reforma del mercado de trabajo impuesta, el que ha desequilibrado las relaciones laborales en favor de los empresarios y el que ha degradado las condiciones de trabajo".
Por su parte, el obispo de Plasencia, Amadeo Rodríguez Magro, puso de manifiesto que en la actualidad tener trabajo "no trae automáticamente y como consecuencia la decencia" y añadió que, "por desgracia, a veces determinadas condiciones laborales carecen del respeto a la dignidad de la persona". Así lo indicó en una carta pastoral divulgada con motivo de la celebración de esta jornada mundial.
