María Ramos, responsable del Centro Nacional de Investigación y Desarrollo (I+D) en Agricultura Ecológica de Plasencia confirmó ayer que las instalaciones que acogerán a este organismo estarán terminadas a principios o mediados del próximo año. "De momento no tenemos todo el personal investigador ni el centro, pero ya estamos trabajando. Toda nuestra labor va a revertir sobre el sector en Extremadura, ya que las investigaciones se van a desarrollar aquí y bajo las condiciones de producción que se dan aquí", explicó ayer María Ramos.

Concretamente, se está ensayando sobre variedades de huertas y en la búsqueda de mejoras en la explotación de los recursos locales (pastos) para evitar la dependencia externa de los piensos. Según Ramos, el objetivo es lograr que el sector cada vez goce de más autonomía y se consolide como una opción altamente sostenible. "Las prácticas de la agricultura ecológica mitigan el cambio climático y adaptan mejor el terreno a estas alteraciones, pero las Administraciones prefieren invertir en buscar soluciones mediante la biotecnología", lamenta la profesora de la Uex Juana Labrador.