El futuro del sector cerealista nacional pasa por el empleo de la semilla certificada y la homogeneización de las variedades, según se desprende de la reunión sectorial de las cooperativas cerealistas de España que tuvo lugar ayer tarde en el marco de las Jornadas Técnicas de Acorex. Antonio Catón, responsable de Cereales de CCAE, y Manuel Liberal, director de Cereales de Acorex, explican que al encuentro han asistido, además, las principales multinacionales y operadores del sector. El cereal se emplea fundamentalmente en la elaboración de piensos animales y de harinas para pan.

La semilla certificada tiene unas garantías de pureza y germinación que redundan en una producción de mayor calidad. Además, los representantes del cereal español aseguran que lo más beneficioso es homogeneizar las variedades y concentrar la oferta en los mercados.

Las cooperativas comercializan al año 14 millones de toneladas de cereal, de un total producido de 22,5 millones. Catón y Liberal aseguran que la última campaña cerealista ha sido muy difícil por la alternancia de periodos de calma con otros de gran volatilidad en los precios. Precisamente éste es uno de sus principales problemas, ya que se ha estado vendiendo cereal por debajo de los costes, según comentan.