El número de empresas activas en Extremadura disminuyó en el 2008 por vez primera en los últimos cinco años, según los datos del Directorio Central de Empresas (DIRCE) del Instituto Nacional de Estadística. Así, si el 1 de enero del pasado ejercicio había en la región un total de 67.852 negocios en funcionamiento, doce meses después la cifra era de 67.181, lo que supone un descenso de casi el 1%. En el lado positivo, la caída contabilizada en la región fue la menor entre todas las comunidades autónomas. La media nacional se situó en el 1,9%.

Por sectores, la peor evolución se registró en el de la construcción, que perdió 575 empresas (5,7%) en Extremadura, pasando de 10.035 a 9.460. A continuación se encuentran el comercio, donde desaparecieron 324 negocios (1,5%) y la industria, con 43 menos (0,7%). Fue en el sector servicios, excluyendo el comercio, donde se registró un mejor comportamiento, con un aumento de 271 empresas (0,87%).

A juicio de la Junta de Extremadura, los datos del DIRCE prueban que "las empresas extremeñas resisten mejor la crisis que las del resto del país", según aseguró ayer en una nota. A nivel nacional, los decrementos más acusados fueron los de Murcia (4,4%), Valencia (3,5%) y Canarias (2,8%), mientras que, además de Extremadura, las pérdidas menos significativas se produjeron en Cataluña, Galicia (ambas con un 1%) y Navarra (1,2%).

INSOLVENCIAS Los datos del DIRCE llegan apenas unos días después de que el INE hiciera públicas las estadísticas sobre insolvencias empresariales del primer semestre del año. En Extremadura se registraron 205 situaciones de este tipo, frente a las 86 del mismo periodo del año anterior, lo que supuso un incremento del 142%, el mayor entre todas las regiones (en toda España crecieron un 19,7%). Angel Martín, director de la Asociación de Empresa Familiar Extremeña (AEEF), señala que en mucho casos se trata de negocios que se ven asfixiadas por la falta de financiación externa, justo cuando más ha bajado la actividad y más ha repuntado la morosidad. "No tiene que significar que sean inviables, sino que en una situación puntual no han podido hacer frente a sus obligaciones. Posiblemente porque a ellas tampoco se les está pagando", apunta.