Llegaron un domingo del pasado mes de junio y, tras 18 horas de vuelo, se fueron directos al hospital. Pocos medios pero muchos pacientes estaban esperando en Tacna, una región al sur de Perú, la llegada de un grupo de sanitarios españoles.

Cinco cirujanos, dos médicos anestesistas y dos enfermeras se han encargado durante dos semanas de operar a casi 200 pacientes con pocos recursos y que llevaban mucho tiempo esperando un solución a sus hernias. «Tacna es una región pobre, tiene un hospital de unas 200 camas pero no cuenta con personal médico suficiente para abastecer a la población que abarca. Allí los cirujanos básicamente realizan intervenciones que son urgentes, pero las hernias que no son complicadas se van demorando en el tiempo y en muchos casos nunca se llegan a operar si no es gracias a campañas de onegés como Cirujanos en Acción», cuenta José Manuel Hernández. Él es uno de los cinco cirujanos que acaban de llegar de Perú y es extremeño, natural de Fuente de Cantos aunque trabaja en Antequera (Málaga). Pero no es el único sanitario de este grupo vinculado con Extremadura. «Ha sido muy curioso porque cinco de las nueve personas del grupo teníamos alguna conexión con Extremadura». Y lo descubrieron en el aeropuerto.

Dos de los cirujanos españoles durante una intervención.

El doctor Hernández ha compartido esta experiencia con una médico anestesista de Olivenza, Pilar Murga, que trabaja en el Perpetuo Socorro y Materno Infantil de Badajoz; con Ana Gloria Pizarro, también anestesista en el hospital 12 de Octubre de Madrid y natural de Llerena; con Claudia Tinoco, cirujana de Badajoz afincada en Valladolid; y con el cirujano pedriátrico José Miguel Morán, que aunque procede de Madrid lleva 30 años ejerciendo en Extremadura y es catedrático de la Facultad de Medicina de Badajoz. A estos profesionales se suman Ana María Gay, la cirujana responsable del equipo, Lucía Catot y las enfermeras Almudena Ceballos y Mercedes Contreras.

Sanitarios peruanos y españoles, en el hospital Hipólito Unanoe.

Organizados por Cirujanos en Acción, una fundación española independiente de carácter humanitario sin ánimo de lucro creada en el 2011, este grupo de sanitarios ha participado de forma altruista durante dos semanas (del 18 de junio al 2 de julio) en una campaña de cirugía de hernias. Y es que esta interveción está considerada la primera causa de muerte por enfermedad quirúrgica, explica el doctor Morán. La misión estaba centrada en la operación de hernias inguinales con la colaboración de otra oenegé (Operation Hernia Foundation), «pero también hemos realizado cirugías de otros tipos de hernias y hemos intervenido a niños con otros problemas», cuenta José Manuel Hernández.

Una de las doctoras con un bebé en brazos.

«Ayudar a los demás es my gratificante y ha sido una experiencia enriquecedora. Además te da la posibilidad de conocer otros sistemas sanitarios y otras culturas y formas de vida», afirma el cirujano de Fuente de Cantos. Estudió en la Facultad de Medicina de Badajoz y hace seis años que dejó la región para especilizarse en Cirugía en Málaga. «Tenía ganas de conocer otra ciudad con buenas comunicaciones, salir de Extremadura. Tras terminar la residencia, empezó a trabajar en el hospital malagueño de Antequera aunque en un futuro le gustaría volver a la región.

Los cirujanos José Manuel Hernández y Lucía Catot.

No es la primera vez que este joven cirujano de 31 años participa en una misión de este tipo. «Hace seis años estuve en Bolivia con otra oenegé, Hombres Nuevos, me gustó mucho la experiencia y quería repetir». Por eso al conocer la Fundación Cirujanos en Acción no se lo pensó dos veces y se apuntó. Solicitó participar en la campaña de hernias en Tacna porque por las fechas era la que mejor le venía. «En el hospital me facilitaron el viaje concediéndome los días como de cooperación», cuenta. Fue el caso de la mayoría de los sanitarios participantes en esta misión excepto el de la extremeña Pilar Murga, que no tuvo esa concesión y viajó con sus días de vacaciones. «Solicité días de cooperación pero me dijeron que no se podía», lamenta la médico extremeña, que reclama que se regule y valore esta actividad como ya se hace en otras autonomías. «Hay gente interesada en hacer este tipo de viajes y creo que se deben facilitar». Los propios sanitarios han corrido con los gastos del viaje y manutención.

El grupo español en el aeropuerto antes de volar a Tacna.

Para esta anestesista era su primera experiencia de cooperación. «Hacía tiempo que quería ir, pero hasta ahora no se han dado las circunstancias. Personalmente ha sido una experiencia muy enriquecedora y satisfactoria, sobre todo porque hemos cumplido los objetivos marcados, pero también ha sido triste ver las condiciones en las que viven porque prácticamente allí no hay nada», apunta.

El grupo español junto a profesionales y autoridades de Tacna.

Para ambos médicos extremeños era la primera vez que participaban en una campaña de la Fundación Cirujanos en Acción y puede que no sea la última. «El grupo que hemos creado ya estamos hablando a ver si el año que viene podemos ir a África o a la India», añade Hernández.

En Tacna el equipo español ha operado en dos semanas a 180 pacientes a los que han realizado más de 220 procedimientos, «porque algunos tenían más de una hernia», explica. Cada día, desde por la mañana hasta la tarde, han realizado una media de 20 intervenciones quirúrgicas y con una tasa de complicaciones muy baja. «La mitad de los pacientes ha sido personas que no tienen acceso al sistema sanitario porque no tienen seguridad social, y la otra mitad sí tenían seguro pero la sanidad no dispone de medios suficientes para atender estas cirugías menos urgentes», cuenta el cirujano fuentecanteño.

De hecho, prosigue, han tratado casos de hernias que prácticamente ya no se ven en España. «Algunos llevaban ocho o nueva años con el problema. Hay casos en que el contenido abdominal lleva tanto tiempo dentro de la hernia que luego es muy difícil reintroducirlo y eso en España se ve muy pocas veces, porque habitualmente todas las hernias suelen ser pequeñas y se operan a tiempo».

El material quirúrgico

Para desarrollar esta campaña el Hospital Hipólito Unanue de Tacna ha habilitado dos salas en desuso y en cada una de ellas se instaló dos mesas de quirófano separadas por un biombo. La mayoría del material empleado ha viajado con el equipo desde España. «Hemos llevado bisturís eléctricos, mallas, suturas,.... aunque ellos nos han cedido todo lo que han podido, no disponen de muchos medios. De hecho, los cirujanos de Tacna cuando operan una hernia ni siquiera utilizan mallas quirúrgicas, que es lo que se hace en cualquier país desarrollado», explica Hernández. Parte de este material que se ha llevado el equipo español ha sido cedido por la intermediación de Quirón Salud Extremadura. Porque Cirujanos en Acción es una entidad sin ánimo de lucro que se nutre de las donaciones de entidades, particulares y de sus socios para ayudar en las misiones que realiza por el mundo.

Pero el cometido de estos profesionales no ha sido solo asistencial, sino también formativa. Demostrar la efectividad y los beneficios de la cirugía menor ambulatoria así como las técnicas que se emplean en los quirófanos españoles era otra de las tareas del equipo español. Los profesionales también han impartido diversas charlas. «Nos han visitado estudiantes de Medicina, residentes y hemos compartido quirófanos con médicos del propio hospital», cuenta Hernández. Y tanto los profesionales locales como los pacientes peruanos, encantados. «Se han mostrado muy agradecidos y emocionados. La población de Tacna es muy humilde y muy agradecida y luego el personal médico nos ha tratado muy bien y nos ha ayudado en todo lo que ha podido», cuenta Hernández. «Porque para la solidaridad no es caridad, es una necesidad del ser humano», concluye el doctor Morán.