Los mendigos han vuelto a Plasencia y ha estallado el primer conflicto en el gobierno del PSOE porque el concejal de Bienestar Social, Victoriano Durán, se desmarcó ayer de la decisión de pagar el billete de autobús a los mendigos para que se marcharan de la ciudad que tomó la edil delegada de Seguridad Ciudadana, Josefa Pérez Camisón. "Yo no hubiera tomado esa decisión --dijo ayer taxativamente Durán-- y no me encaja que se haga y se diga".
Pérez Camisón, sin embargo, replicó que no quiere polemizar y se limitó a señalar que "lo mismo que piden para comer, piden para marcharse" porque su versión siempre ha sido que los pedigüeños pidieron irse si el ayuntamiento les facilitaba los billetes de autobús.
Entre tanto el martes por la tarde fueron vistos de nuevo en la céntrica calle del Sol los mismos transeúntes que habían cogido billetes a Béjar, Cáceres y Zamora y la exasperación de los comerciantes no se ha hecho esperar.
LAS CIEN FIRMAS
Como la del concejal de Bienestar Social, que no tuvo reparos en cuestionar la decisión de su compañera de filas y añadió públicamente su intención de manifestar en la comisión de gobierno el descontento que esta situación le ha provocado. "No son muebles --dijo-- para moverlos de aquí para allá" aunque reconoció que "algunos eran violentos y hay que llamarles la atención".
Durán fue tajante al indicar que "esta política no es del PSOE y como entremos en esta dinámica nos metemos en la política del PP", pero también muy fue crítico con la recogida de las cien firmas por la Asociación de Comerciantes Zona Centro para erradicar la mendicidad. "Que se recojan firmas me parece muy mal" y advirtió de que "como empecemos así también acabaremos echando a los de IU porque no nos gusta que lleven una bandera de la República".
También cuestionó el llamamiento que hizo la asociación a los ciudadanos para que denuncien en el juzgado los insultos y amenazas, si los hay, de los mendigos. "Si tienes que denunciar a alguien --zanjó-- los denuncias tú y no te escudas en nadie". Mientras que esto fue lo único que añadió ayer la concejal de Seguridad Ciudadana al animar a los vecinos que se sientan ofendidos a recurrir al juzgado. "Lo llevo diciendo quince días, pero nada" se lamentó al tiempo que aseguró haber visto recibir insultos de algunos mendigos a algunas mujeres.
Por otra parte, Durán lamentó la polémica surgida con los comerciantes de Cáceres, pero añadió que "el concepto de los comerciantes de Cáceres es el mismo que los de Plasencia" en alusión a que ninguno quiere cerca este problema de difícil solución, que ha colmado la paciencia de los placentinos y alarmado a los cacereños porque hasta allí se fue uno de los transeúntes.
