Los comerciantes de Badajoz, Cáceres y Plasencia aseguran que la temporada de rebajas, que termina pasado mañana, ha sido negativa en cuanto a ventas, y sólo los de Mérida y los directivos de El Corte Inglés pacense se muestran satisfechos con el negocio realizado desde el pasado 7 de enero. La falta de adaptación al euro y la crisis económica son las causas que justifican, según los empresarios, que las rebajas se hayan saldado con entre el 5 y el 10% menos de facturación.

Las agrupaciones consultadas ayer por EL PERIODICO EXTREMADURA coinciden en que las rebajas han sido buenas para los consumidores, pero negativas para los comerciantes, que no han vendido todo lo almacenado.

El presidente de la asociación de comerciantes de la calle Menacho de Badajoz, Emilio Doncel, achaca este hecho "al euro" y a que "la gente no tiene dinero"; mientras que Pedro Rosado, representante de los empresarios cacereños, argumenta que "hay una cierta crisis general".

En Plasencia pasa lo mismo, y según José María Pérez, "lo único que pueden hacer las rebajas es recuperar costos, pero no se gana dinero".

Sin embargo, Eugenio Montosa, miembro de la asociación de comerciantes de Mérida, destaca que "se ha vendido entre un 10 y un 20% más que el año pasado"; unos resultados positivos refrendados también por El Corte Inglés de Badajoz.