El presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, colocó ayer la primera piedra del segundo tramo de la autovía regional entre Navalmoral de la Mata y Plasencia, comprendido entre el río Tiétar de la Nacional 630, que tiene una longitud de 22,7 kilómetros, un presupuesto de 63,5 millones de euros y un plazo de ejecución de 52 meses. Con este tramo, se completan las obras de las dos autovías regionales en marcha.

En su intervención, el jefe del Ejecutivo manifestó que hace diez o doce años parecía irreal el hecho de que en Extremadura se llegara a este punto de poder construir "con el esfuerzo de todos los extremeños dos autovías autonómicas, ya que entonces teníamos un seiscientos y el resto un fórmula uno".

En este sentido, señaló que hace dos años el Gobierno extremeño "soñó" en Yuste con hacer dos autovías "y, en dos años, hemos hecho el proyecto, el estudio y las máquinas están trabajando en ambas", con lo que, a su entender, se demuestra que "con ganas, dinero y voluntad se pueden hacer las cosas".

Por otro lado, Rodríguez Ibarra reclamó al Gobierno central que adjudique lo antes posible los tramos que restan de Plasencia y Cáceres de la Autovía de la Plata, con el objetivo de buscar "encuentros" con la autovía autonómica Navalmoral de la Mata-Plasencia y evitar así "cuellos de botella que al final lo único que suponen es que estemos tirando el dinero".