¿QUÉ ES?

Una persona transexual es aquella cuya identidad sexual no se corresponde con el sexo biológico. La transexualidad es una condición natural con la que se nace, que se va formando durante la gestación del feto y que implica que el sexo neurobiológico es distinto al gonadal. «El problema reside en que la medicina actual no es capaz de designar la transexualidad al bebé, de manera que le asignamos una identidad sexual que en la mayoría de los casos se corresponde con sus genitales, pero en otros no», explican desde la Fundación Triángulo.

PROTOCOLO

La manera de acceder al SES (Servicio Extremeño de Salud) es a través de Atención Primaria, que deriva a la persona a un equipo de Salud Mental para que se inicie el proceso. «Un psicólogo (o un psiquiatra en algunos casos) es el primer filtro. No obstante, el informe que redacta no se trata de un diagnóstico, puesto que en ningún caso hablamos de una enfermedad, pero ese profesional es quien permite que la persona pueda pasar al endocrino, es quien abre el proceso para que el SES pueda intervenir», indican desde Triángulo. A partir de ahí se inicia el tratamiento médico, el proceso de hormonación.

INTERVENCIONES

Es el endocrino quien posteriormente coordina la secuela de intervenciones. No obstante, hay personas que no llegan a dar este paso. «Hay quienes paran el proceso de hormonación en un momento determinado. Y tampoco todo el mundo se hormona. Cada cual elige libremente hasta donde necesita llegar y hasta donde se siente a gusto».

LA IDENTIDAD SOCIAL

J Además de la cuestión médica, hay una parte social «que no tiene ningún tipo de protocolo y que cada persona se va construyendo a su ritmo». Desde Fundación Triángulo explican: «La neurociencia sí ha demostrado que existe un cerebro masculino y otro femenino y es ahí donde está nuestra identidad sexual, no es nuestros genitales.