Los extremeños podrán beneficiarse a partir del próximo lunes de la ayuda de 2.000 euros para la compra de un coche nuevo. El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, se reunió ayer con las comunidades autónomas para concretar esta medida, un encuentro en el que varios gobiernos regionales expusieron sus reticencias a la iniciativa.

La Junta de Extremadura respalda esta ayuda y aportará los 500 euros que corresponden a cada comunidad. Pero además, lo hará a partir del lunes, sumándose así a la decisión del ministerio y los fabricantes de adelantar la puesta en marcha de la medida del 1 de junio al 18 de mayo. De esta forma las administraciones pretenden evitar el presunto parón de la demanda que estaban registrando los concesionarios desde el anuncio del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el pasado martes. "En estos días se han frenado muchas operaciones que ya teníamos casi cerradas porque los clientes quieren esperar para beneficiarse de las ayudas", reconocía ayer Pedro Marín, director comercial del Grupo Marcesa, que tiene varios establecimientos de venta de vehículos en Extremadura.

En principio, según informa el ministerio, la ayuda será directa. Aunque hay condiciones: el comprador deberá entregar un coche viejo de más de diez años para achatarramiento y el nuevo vehículo no podrá tener un precio superior a los 30.000 euros ni unas emisiones de CO2 por encima de los 140 gramos por kilómetro.

Los concesionarios extremeños han acogido la medida con satisfacción. "Nos va a beneficiar bastante, aunque se debería haber hecho antes para evitar la pérdida de empleos", advertía ayer Antonio Rojas, gerente de Convesa, concesionario oficial de Opel en Badajoz. "El sector lo estaba pidiendo a voces y por fin han actuado, aunque de forma un tanto precipitada. Deberían haberlo consensuado antes con todas las administraciones porque han generado mucha incertidumbre", según Miguel Sevilla, su homólogo en Divasia y Diveca, distribuidores de KIA y Ssangyong en Cáceres.

30% MENOS DE VENTAS De acuerdo con los datos facilitados por la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles, Anfac, y la patronal de vendedores de vehículos a motor, Ganvam, durante el pasado año se matricularon en Extremadura 17.453 turismos, casi un 30% menos que en el 2007. Entre enero y abril de este 2009 la caída se ha elevado ya al 34% respecto al mismo periodo del 2008.

Este descenso de las ventas ha originado una acumulación de vehículos nuevos en las campas de los concesionarios extremeños. Desde Ganvam estiman que la cifra de automóviles a estrenar almacenados en la región ronda los 7.500 y apuntan a las dificultades de financiación como principal motivo del parón de la demanda durante los últimos meses. "La financiación es la llave maestra de la demanda, ya que el 80% de las compras de automóviles y el 100% de las de vehículos industriales son financiadas", explican.

Los clientes ya han comenzado a interesarse y preguntar en los puntos de venta por estas ayudas, como confirma Joaquín Oiz, director comercial de Car 88, concesionario de Ford en Cáceres. Esta marca, al igual que Renault, ha anunciado bonificaciones extras en algunos modelos, lo que puede suponer un ahorro de hasta 6.500 euros --más lo anunciado por el Gobierno--.

Según Rodríguez Zapatero, esta ayuda puede favorecer también a los gobiernos autonómicos, que son los que recaudan el impuesto de matriculación. Así, según datos facilitados por la Consejería de Administraciones Públicas y Hacienda, en 2008 la Junta ingresó 17,5 millones de euros por este tributo, un 40% menos que en el 2007. Y en el primer trimestre, la cantidad recauda 2,7 millones, es la mitad que en los tres años anteriores.