La primera ronda de negociación de la consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco-Morales con los distintos grupos parlamentarios para negociar los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2018 ha concluido hoy, centrada en las modificaciones del Impuesto de Sucesiones.

Blanco-Morales, que hoy se ha reunido con el PP y Podemos, igual que ayer lo hizo con C's, ha planteado que la Junta está "abierta a hablar de todos los tributos", aunque ha defendido que la reforma fiscal que se aborde en el marco de la negociación presupuestaria "tiene que ser neutra a efectos de recaudación".

Ha dicho que están abiertos "a recibir iniciativas de todos los grupos parlamentarios", aunque ha insistido, como dijo ayer Vara, en que el planteamiento de la Junta es "no tocar" el Impuesto de Donaciones.

Con respecto al de Sucesiones, ha dicho que quieren "configurar la parte del tributo que es autonómica, de manera que se beneficie al mayor número de ciudadanos posible".

Blanco-Morales ha planteado, asimismo, una simplificación tributaria, "mayor transparencia, mejor gestión y, sobre todo, mayor equidad" con una reforma fiscal que tenga efectos recaudadores neutros, "para lo que hay diferentes instrumentos", según ha manifestado.

En ese sentido, la consejera ha rechazado, como ha afirmado el PP, que esa neutralidad se logre bajando impuestos pero a costa de subir otros, y ha aclarado que Extremadura tendrá más ingresos gracias a las políticas de reactivación económica que se llevan a cabo en la región, además de que se puede mejorar la recaudación y analizar otros tributos.

Ha recordado que Vara, en el pasado Debate sobre el Estado de la Región, se comprometió a bajar el IRPF en el tramo autonómico para las rentas más bajas y que la Junta también está dispuesta a bajar el Impuesto de Sucesiones "bajo determinadas condiciones".

Además, ha precisado que ese descenso tiene que ser "equitativo" y responder a la realidad económica y social de Extremadura, pero ha aclarado que nunca lo hará en "fraude de ley", como, a su juicio, pretende el PP al plantear una bonificación del 99%.

Por su parte, la portavoz del Grupo Popular, Cristina Teniente ha ha calificado como "absolutamente decepcionante" la reunión con Blanco-Morales, por su inmovilidad en temas como la bajada de impuestos como el de sucesiones.

Teniente ha lamentado la postura de la consejera de que la demanda popular de bonificar un 99% este impuesto "no vale ni como punto de partida" para negociar.

La portavoz popular ha indicado que su grupo plantea también la la bajada del canon del agua y de los impuestos a los hidrocarburos, mientras que Junta defiende subir otros para compensar los ingresos.

A juicio de Teniente, ahora es "el momento" de disminuir la presión fiscal extremeña, la más alta del país a su juicio, gracias a la mejoría de la situación económica.

Muy distinto ha sido el tono empleado por la diputada de Podemos Irene de Miguel, quien ha valorado el encuentro con la consejera y el hecho de que la negociación presupuestaria "avance", aunque ha insistido en que su grupo tiene que estudiar muy bien el borrador cuando se presente, para comprobar que "no hay recortes" y que existen garantías de cumplimiento de lo que se acuerde.

De Miguel ha insistido en que su grupo quiere "unos presupuestos progresistas y sin recortes" y ha destacado que hay partidas, como las destinadas a políticas sociales o a la generación de empleo de calidad, que deben de quedar "garantizadas" en los presupuestos del año que viene.

La diputada de Podemos ha anunciado que, en el marco de esta negociación, han registrado hoy en la Cámara una propuesta de impulso para tratar de solventar las "injusticias" que está causando el Impuesto de Sucesiones, pero sin establecer más bonificaciones ni eliminarlo, ya que aporta a las arcas de la región unos 40 millones de euros anuales, esenciales para la financiación de servicios básicos como al Educación o la Sanidad.